El preso político cubano Luis Robles denunció un humillante traslado esposado al hospital esta semana, lo que desató indignación entre activistas por el vejatorio trato del régimen castrista.
Robles, condenado a 5 años por protestar pacíficamente, dijo en audio sentirse avergonzado al ser llevado con grilletes en pies y manos como si fuera “un criminal”. Su madre confirmó el ultraje y exigió respeto al derecho de su hijo como paciente.
“Pasé tremenda vergüenza, como si fuera un criminal”. Encadenado, así conducen a Luis Robles a una consulta en un hospital habanero.#SOSCuba #cubanos pic.twitter.com/9pPHn6oJQU
— Cubanet 🇨🇺 (@CubanetNoticias) September 28, 2023
El joven padece problemas de salud en la cárcel Combinado del Este donde cumple su injusta sentencia. Pese a que le aprobaron en agosto pasar a menor severidad, sigue recluido mientras el aparato represivo dilata su caso.
Expertos explican que por ser preso priorizado, su expediente debe ser aprobado por el Departamento de Prisiones del temido Ministerio del Interior, ente que en realidad decide su destino sin garantías procesales.
El ultrajante episodio del hospital, que exhibe la crueldad del sistema carcelario castrista, ocurre después de que la CIDH emitiera una medida cautelar advirtiendo del “riesgo de daño irreparable” a sus derechos en la isla.
Activistas exigen el fin del abuso contra Robles y miles de presos políticos y de conciencia sufridos por el régimen. Su calvario representa la tragedia de un pueblo sometido 62 años al totalitarismo comunista, mientras la libertad sigue siendo una quimera.