MIAMI, Estados Unidos. — El canciller del régimen cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, desmintió las palabras del embajador de Cuba en Moscú, Julio Garmendía, quien aseguró recientemente que las autoridades de la Isla no se oponían a la “participación legal” de ciudadanos cubanos en el conflicto en Ucrania.
Contrario a lo que afirmó Julio Garmendía a la agencia estatal Ria Novosti, el alto funcionario señaló que La Habana se oponía a la participación de ciudadanos cubanos “en cualquier conflicto”.
La posición inequívoca e invariable del gobierno cubano, conforme a la legislación nacional, es contraria a la participación de ciudadanos cubanos en cualquier conflicto, contra el mercenarismo y contra la trata de personas”, escribió Rodríguez Parrilla en la red social X.
La posición inequívoca e invariable del gobierno cubano, conforme a la legislación nacional, es contraria a la participación de ciudadanos cubanos en cualquier conflicto, contra el mercenarismo y contra la trata de personas.
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) September 14, 2023
Las declaraciones del canciller castrista dejan en evidencia las contradicciones en el seno del régimen cubano respecto al probado reclutamiento de mercenarios cubanos por parte de Rusia. Según han asegurado los mismos soldados de la Isla, su misión es cubrir posiciones en territorios ocupados por el ejército ruso, así como en localidades fronterizas con Ucrania.
“No tenemos nada en contra de los cubanos que quieren firmar un contrato y participar legalmente en esta operación con el Ejército ruso. Pero nos oponemos a la ilegalidad y estas operaciones no están dentro del marco legal”, aseveró este jueves el diplomático sobre los reporteros de ciudadanos de la Isla que han sido reclutados en la guerra, que ya se extiende por casi 20 meses.
La presencia de cubanos en el conflicto bélico fue confirmada cuando en agosto por dos jóvenes de 19 años, Andorf Velázquez García y Alex Vegas Díaz, quienes denunciaron que habían sido engañados sobre un viaje a Rusia.
En una grabación que fue difundida por medios independientes, los jóvenes explicaron que habían firmado un contrato (en ruso) para ir a trabajar allí, pero en realidad iban para unirse al Ejército ruso. Además, dijeron encontrarse sin documentos (que les fueron retirados) y aseguraron que había muchas más personas en su situación.