Por los edificios de Obispo 202 y Cuba 653, en La Habana Vieja, no parecen haber pasado 65 años de Revolución. Pulcros, con paredes lisas y pintura nueva, recién rehabilitados gracias al dinero saudita, contrastan con los inmuebles circundantes, al borde siempre del colapso.
Las obras de restauración fueron inauguradas el pasado sábado con la presencia de las autoridades de La Habana, con motivo del 504º aniversario de la fundación de la ciudad, y la prensa oficial se hizo eco con las habituales fanfarrias.
Según Tribuna de La Habana, tras la reconstrucción, llevada a cabo por la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana con ayuda del Fondo Saudita para el Desarrollo (FSD), se entregaron las 11 viviendas renovadas de Cuba 653 –antiguo Palacio del Marqués de la Real Proclamación– y las otras 13 de Obispo 202 “a familias que se encontraban en situaciones complicadas de alojamiento”.
No parece, sin embargo, que los apartamentos, “renovados y de gran confort”, en palabras del diario local, estén habitados por gente vulnerable. “Estas familias son muy pero que muy escogidas, olvídate”, decía este miércoles una vecina de la zona, que ha observado el movimiento de entradas y salidas. Armados con walkie-talkies, agentes de seguridad se encargan de controlar el acceso a ambos inmuebles.
Dentro, todo es lujo, paredes inmaculadas y silencio. “¿Tú crees que estas casas se las dan a alguien que no repita ‘viva Fidel’?”, cuestionaba retóricamente la mujer, que coló a este diario en Cuba 653 aprovechando el despiste de los cuidadores. “Esto no es del pueblo de a pie”.
Tal y como refirió Tribuna de La Habana, el FSD también ha financiado el Acuario del Centro Histórico, a cargo igualmente de la Oficina del Historiador, que, hasta que fue esquilmada por las Fuerzas Armadas, llegó a ser un poder dentro del poder bajo el mando del hoy fallecido Eusebio Leal.
Lo que no dijo el periódico oficialista es que el mismo fondo fue el que financió la faraónica obra del Centro Fidel Castro Ruz, abierto en El Vedado a finales de 2021. Entonces, una fuente de la Oficina del Historiador de La Habana confesó a 14ymedio: “Se supone que el crédito era para viviendas, pero cogieron una parte para el Centro y para el Capitolio también”.
En efecto, en 2017 el Fondo Saudita para el Desarrollo concedió un préstamo de 26,6 millones de dólares a Cuba para el Programa de Rehabilitación y Construcción de Obras Sociales de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, destinado, oficialmente, a solucionar el acuciante problema de la vivienda en la capital.
Sin que haya mediado información oficial, hasta ahora este diario pudo averiguar que entre las obras levantadas con el FSD estaba el edificio Práctico del Puerto, otro con vistas a la Plaza de Armas, el Castillo de la Fuerza y la bahía de La Habana.
De los vecinos originarios del Práctico del Puerto, desalojados al comenzar las obras de restauración, solo volvió uno, Francisco Muñoz. El resto de apartamentos, con una vista espectacular a la bahía de La Habana, fue a parar, aseguran los residentes del barrio, a trabajadores del Ministerio de Salud.
Muñoz contó a finales de 2021 a 14ymedio que pudo regresar a su casa original porque estuvo “ocho años viviendo aquí al frente sin moverme, dentro de un contenedor” y gracias a Eusebio Leal, con quien trabajó doce años cuando era jefe de obras en la Oficina del Historiador. “Hasta un militar vino una vez a sacarme y él me defendió con la ley en la mano”, aseguró entonces. Del resto de vecinos, relató: “Hubo gente aquí que se fue para el albergue y no pudieron volver, tengo noticias de que todavía hay un matrimonio que está albergado”.
El FSD, que comenzó a operar en 1975 y tiene como principal cometido financiar proyectos para países en desarrollo, ha aprobado préstamos a Cuba para proyectos relacionados con la rehabilitación de redes hidráulicas (122 millones de dólares en 2016), para mejorar el alcantarillado de la ciudad de Camagüey (40 millones de dólares en 2014), para recuperar las redes hidráulicas en La Habana (30 millones en 2013) o para adquirir equipos médicos destinados a centros de atención materna (en 2010).
Además y a cambio de más de 10.000 dólares mensuales por cada uno, aunque ellos solo reciben un estipendio de 1.000 dólares, la Isla exporta a la nación árabe 120 médicos al año en virtud de un acuerdo suscrito en 2013.
El pasado octubre, Ricardo Cabrisas, vice primer ministro y ministro de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, realizó una visita de trabajo a Arabia Saudita, para “pasar revista” al estado de las relaciones bilaterales, informó la agencia Prensa Latina. A la vista está, continúan con los mismos bríos.
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