Home Cuba El asesino que aterrorizó Londres: ¿Quién fue Jack el Destripador?

El asesino que aterrorizó Londres: ¿Quién fue Jack el Destripador?

0
El asesino que aterrorizó Londres: ¿Quién fue Jack el Destripador?
El asesino que aterrorizó Londres: ¿Quién fue Jack el Destripador?

MIAMI, Estados Unidos. — En la Inglaterra victoriana, East End era un distrito de Londres ocupado por cerca de un millón de habitantes pobres. En aquel ambiente de desigualdad, abandono y violencia, muchas mujeres debían dedicarse a la prostitución. Fue en el barrio de Whitechapel, muy concurrido por su comercio sexual, donde apareció la primera víctima de uno de los más famosos asesinos en serie: Jack el Destripador.

Mary Ann Nichols, alias “Polly”, fue ultimada el 31 de agosto de 1888. La policía halló su cuerpo con cuchilladas en la tráquea, el esófago, el vientre y la columna vertebral. Gracias a una investigación realizada por la historiadora estadounidense Hallie Rubenhold se ha sabido que la mujer había estado casada y dado a luz a seis hijos. Tras separarse de su esposo adúltero, malvivió en un asilo para desamparados, sucumbió al alcoholismo y terminó sus días mutilada en un callejón por un individuo al que la policía jamás encontró, a pesar de haber cometido otros cuatro crímenes contra mujeres en esa misma comunidad.

La policía ni siquiera se detuvo a estudiar la escena del crimen. Lavaron el pavimento y el cadáver de Nichols antes de realizarle cualquier examen. Nadie reparaba en las prostitutas. Dieron el caso por cerrado, presumiblemente para que no cundiera el pánico y no se preocuparon más hasta el 8 de septiembre de ese mismo año, cuando apareció el cuerpo de Annie Chapman, la segunda víctima del misterioso y despiadado homicida, que mutilaba a sus presas con habilidad quirúrgica.

Otras dos mujeres fueron asesinadas el 30 de septiembre: Liz Strides y Kate Eddowes. Para entonces, la policía había determinado un patrón en los asesinatos. El cliente ofrecía pagar por sexo, llevaba a sus víctimas a un lugar apartado y allí las degollaba con un cuchillo de seis pulgadas.

La policía recibió varias cartas de autores anónimos que se adjudicaban los crímenes. Sin embargo, entre tanto morbo y sensacionalismo hubo dos misivas que revelaban detalles que solo podían conocer las autoridades y el asesino.

Había quedado claro que Jack el Destripador no era un sujeto corriente ni un burdo sicario. Los principales sospechosos fueron, en su momento, Edward, Duque de Clarence —hijo del rey Edward VII— y el eminente médico Sir William Gull. También recayeron sospechas sobre judíos y masones, pero la verdadera identidad del asesino quedó en las sombras para convertirse en el mito urbano que ha llegado hasta nuestros días.

Exit mobile version