LA HABANA, Cuba. – Diego La Velle Cevallos-Garzón, un deportista oriundo de Santiago de Cuba, será la pieza clave en la organización del Campeonato Mundial de Boxeo Gay (WGBC) en su segunda edición, que se iniciará en Chicago el 20 de junio de 2024.
Según reportes, La Velle aprendió boxeo a los ocho años. Al entrar en Estados Unidos estuvo un corto tiempo en Miami para luego establecerse en Chicago donde su negocio más reciente fue abrir el Strong Hands Gym, en el que ya se ultiman los preparativos para la competencia internacional que, según los organizadores, espera contar con muchos aficionados y un éxito similar al Primer Mundial celebrado Sydney, Australia, en febrero de 2023.
La Velle es el dueño del primer gimnasio LGBTQ+ de Chicago, ubicado en el distrito Northalsted de Lakeview, formalmente conocido como Boystown, y este año él fue escogido por los editores del medio estadounidense especializado Out entre los 100 personajes de esta comunidad que en 2023 generaron un impacto en la cultura y la sociedad.
En esta lista, considerada la más antigua en el contexto estadounidense, en el mundo del deporte ―que sigue siendo un campo desafiante para los representantes LGBTQ+― junto al cubano figuran rostros conocidos como la nadadora Diana Nyad, que estableció récord mundial al nadar entre Cuba y Florida sin jaula contra tiburones en 2013.
También están Jaiyah T.Saelua, de Samoa Americana, considerada la primera mujer tránsgenero en un partido de clasificación para la Copa del Mundo de FIFA y quien debutó con el equipo nacional varonil de su país en 2006; Kevin Maxen, entrenador asistente de fuerza de los Jacksonville Jaguar en la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) y Anthony Bowens, un luchador profesional de All Elite Wrestling y el actual poseedor del título.
La nominación de La Velle para para “Out 100″ indica que, después de 10 años de experiencia como entrenador personal y más de 15 años de experiencia en boxeo y kickboxing, el cubano hizo historia al abrir Strong Hands Gym.
La reseña añade que el cubano, un hombre gay negro, ha ganado más de 111 peleas de aficionados y que alguna vez ocupó el puesto 19 a nivel nacional, y “ha creado un espacio seguro para personas de un espectro de identidades marginadas, incluidas las personas LGBTQ+, las personas discapacitadas y las personas de color”.
“Mi objetivo final es crear un ambiente donde todos los que entran a mi gimnasio y se unen a mis sesiones de entrenamiento salen con una sensación de renovación y logro después de cada visita”, dice el santiaguero. Los servicios de su instalación incluyen entrenamiento individual, orientación sobre dietas y nutrición, culturismo, artes marciales mixtas, y cursos de defensa personal para sus clientes trans.
“Mi propuesta es cerrar la brecha dentro de nuestra comunidad, abogando por la armonía entre masculinidad y feminidad”, dice Cevallos-Garzón.
“Es esencial reconocer que ambas cualidades son valiosas y debemos abstenernos de marginar a quienes las encarnan. Mi objetivo es promover la unidad y demostrar que todos somos aliados en este esfuerzo”, también comenta.
La misión del deportista santiaguero es aceptar a todos los miembros de la comunidad y sus aliados “que se sientan fuera de lugar e incómodos en otros gimnasios”.
La Velle asegura haber entrenado y preparado a buena cantidad de estrellas de la Ultimate Fighting Championship (UFC). El atleta caribeño espera que, al ser abiertamente gay, pueda brindar una sensación de consuelo y apoyo a la comunidad LGBTQ+.
De acuerdo con el conocido reportero de investigación de la televisora ABC 7, Jason Knowles, quien defendió la nominación del cubano en la lista de “Out 100”, el activista afrolatino “está llevando su misión un paso más allá con planes de iniciar un programa gratuito de autodefensa para mujeres trans de color que pueden ser blanco de violencia”.
El atleta de la mayor de las Antillas ha dicho que su gimnasio “fue creado para que la comunidad LGBTQ viniera y aprendiera boxeo, entrenara y se sintiera segura, y no juzgada. Quería un gimnasio donde, si querías entrar con peluca y maquillaje, fuera algo normal. Mi comunidad se lo merece”.
Según datos en redes sociales, el santiaguero de 35 años está clasificado en dos categorías para las competencias nacionales de fisicoculturismo en Estados Unidos y aspira a que el Comité Nacional de este deporte le otorgue su licencia como profesional. Actualmente también compite por Mr. Muscle & Fitness para la conocida revista del mismo nombre.
El cubano está asociado con el fundador de los Mundiales de Boxeo Gay, el australiano Martin Stark, para concretar la próxima competición con la pretensión de “llevar el poder unificador del boxeo a uno de los eventos de Orgullo más grandes y populares de Estados Unidos” que tiene por sede a Chicago.
Stark dice haber creado la organización sin fines de lucro World Gay Boxing Championships, para combatir la homofobia y la transfobia y liderar cambios en el deporte. Además, organizó la primera competencia de boxeo amateur como parte del Sydney World Pride.
El puertorriqueño Orlando Cruz que, como aficionado representó a Puerto Rico en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000, y luego desarrolló una carrera profesional, es considerado el primer boxeador en haber hecho público que era gay estando todavía activo en el ring.
En la historia del boxeo cubano no se han registrado pugilistas que hayan declarado públicamente una orientación sexual no heterosexual.
En el movimiento deportivo cubano, en mayo de 2019, la actual gran estrella del voleibol mundial, Melissa Vargas, también hizo historia: viviendo en el extranjero, confirmó con orgullo su orientación sexual al mostrar en redes sociales imágenes de las nupcias con su pareja.
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