“Lo vi mal. Sus ojos estaban hundidos, con ojeras negras, extremadamente delgado”, aseguró la madre del joven preso político.
MIAMI, Estados Unidos. – El preso político cubano Andy García Lorenzo lleva nueve días en huelga de hambre, según denunció su hermana, Roxana García Lorenzo, por medio de una publicación en Facebook. La familia del joven supo de la huelga apenas este jueves, durante la visita mensual que realizaron sus padres a la prisión donde el preso del 11J permanece recluido.
García Lorenzo reclama la devolución de unas cartas personales que le fueron arrebatadas por las autoridades carcelarias. La madre del joven, que pudo verlo en persona, describió su estado: “Lo vi mal. Sus ojos estaban hundidos, con ojeras negras, extremadamente delgado… Le faltaba el aire al hablar; intentaba hacerlo, pero tenía que hablar muy despacio porque ya no tiene fuerzas”.
Según la hermana, su situación sigue marcada por la violación sistemática de derechos humanos. García Lorenzo, próximo a cumplir cuatro años de prisión, enfrenta la negativa a su libertad condicional y rebaja de condena.
La familia aseguró que también se encuentra alarmada porque “durante su última huelga de hambre fue golpeado y sometido a condiciones inhumanas”.
En su denuncia, Roxana García Lorenzo exigió la devolución inmediata de las cartas, así como la liberación de su hermano y el respeto a sus derechos fundamentales. La familia responsabilizó al régimen cubano y a la Seguridad del Estado por cualquier daño físico o psicológico que pueda sufrir el joven. También instó a la comunidad nacional e internacional a ejercer presión: “La vida de Andy depende de la presión que podamos ejercer juntos”, escribió la hermana del preso político.
Andy García Lorenzo fue violentamente detenido el 11 de julio de 2021 y sentenciado a cuatro años de privación de libertad por participar, en Santa Clara, en las protestas populares que ese día se extendieron por toda Cuba. En mayo de 2022 fue excarcelado durante cinco días, y devuelto a prisión, esta vez a un campamento de trabajo para reclusos.