Los senadores estadounidenses Rick Scott, Marco Rubio, Tom Cotton, Joni Ernst y Markwayne Mullin enviaron una carta a la Administración Biden para que niegue la entrada a los dictadores Miguel Díaz-Canel y Nicolás Maduro a EE. UU. para la Asamblea General de Naciones Unidas.
En el próximo mes de septiembre tendrá lugar en Nueva York la Asamblea General de la ONU y es muy posible que Maduro y Díaz-Canel asistan, como en otros años.
Los senadores señalan que Estados Unidos debe evitar que la Asamblea General se convierta en un escenario para que los “líderes más malvados de la Tierra ganen credibilidad y promuevan sus peligrosas opiniones, que plantean amenazas significativas para la seguridad nacional de Estados Unidos y nuestros aliados”.
En su misiva, los políticos también piden que se le niegue el ingreso al país norteamericano al dictador de Irán, Masoud Pezeshkian.
Sobre el régimen de La Habana enfatizaron en que “Díaz-Canel, quien heredó y ha mantenido la dictadura de Castro y la brutal opresión del pueblo cubano, tiene una historia de décadas de amenazar a Estados Unidos y albergar a sus peores enemigos, incluyendo permitir que la China comunista construyera una base de espionaje a 90 millas de Estados Unidos y recientemente organizar ejercicios militares con Rusia que llevaron submarinos rusos de energía nuclear a solo millas de la costa de Florida”.
Asimismo agregaron que, “si bien la Asamblea General de las Naciones Unidas es un foro de diálogo y negociaciones diplomáticas, Estados Unidos siempre ha adoptado una postura de principios en contra de permitir que líderes extranjeros que amenacen nuestros valores e intereses participen en este evento en nuestro territorio (…) En este sentido, le instamos a que niegue las visas de entrada a los dictadores Pezeshkian, Díaz-Canel, Maduro y cualquier otro líder cuya presencia en la Asamblea General de las Naciones Unidas socave nuestra seguridad nacional”.
En septiembre del año anterior Díaz-Canel viajó a Nueva York para participar en la 78 Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas.
La presencia de Díaz-Canel en la sede neoyorquina de la ONU fue criticada por activistas y opositores cubanos, quienes reprocharon que se le permitiera la entrada a EE. UU. a un presidente acusado de violar los derechos humanos, mantener presos políticos y apoyar la invasión rusa a Ucrania.
Organizaciones opositoras como Cuba Decide, Somos+, Juntas y Revueltas y Cuban Freedom March realizaron manifestaciones durante los días que duró la Asamblea General de la ONU.
