El preso político cubano Yasmany González enfrenta problemas de salud en la prisión Combinado del Este y no recibe la atención médica que requiere .
González está “muy flaquito y con diarreas”, presuntamente debido a la contaminación del agua en la prisión, dijo su esposa, Ilsa Ramos, a Martí Noticias.
La esposa del preso político denunció que en el penal “no tienen atención (médica) de ningún tipo, no tienen medicamentos”.
A pesar de haber recibido ya su sentencia, las autoridades penitenciarias mantienen a González en un destacamento con reos pendientes de sanción, con lo cual continúan negándole los beneficios de pase que le corresponden.
La reeducadora del penal ha justificado la situación de González alegando que por el delito cometido “ameritaba estar ahí” y que se le deniegue el beneficio de mínima severidad.
Una solicitud previa para este beneficio fue rechazada y ahora deberá esperar hasta diciembre para una posible reconsideración.
González, de 31 años, fue condenado a cuatro años de cárcel por el supuesto delito de “propaganda contra el orden constitucional”.
Fue detenido en abril de 2023 supuestamente por ser el autor de unos carteles antigubernamentales que aparecieron en la capital del país.
Inicialmente estuvo en Villa Marista, sede de la Seguridad del Estado en la capital cubana.
Durante el juicio, las autoridades del régimen intentaron sumarle más delitos al activista, pero su abogada lo defendió, sosteniendo que él solo estaba allí por la aparición de los carteles mencionados.
