MIAMI, Estados Unidos. – El periodista independiente cubano José Luis Tan Estrada, colaborador habitual de CubaNet, salió de la Isla en la última semana de diciembre tras dos años de hostigamiento, vigilancia y amenazas por parte de la Seguridad del Estado.
“Salí bajo condiciones muy extremas de Cuba, salí (…) con los ojos cerrados y poniendo el pecho a un futuro… a una tierra muy diferente a la mía (…). La Seguridad del Estado me obligó a abandonar Cuba; yo salí bajo tremenda presión”, recalcó Tan Estrada en una entrevista con Martí Noticias.
“Hace más de dos años que estoy recibiendo una presión constante de la Seguridad del Estado, desde mi expulsión de la Universidad de Camagüey”, agregó el joven.
El también activista, de 26 años, actualmente se encuentra en Guyana, según precisó al medio citado.
Tan Estrada también contó que su salida se produjo luego de un frustrado intento de viajar a Nicaragua, el pasado 25 de diciembre. Pese a contar con todos los requisitos legales para viajar al país centroamericano, las autoridades migratorias del régimen de Daniel Ortega le prohibieron la entrada. “Perdí 5.000 dólares del pasaje porque la aerolínea no devuelve el dinero”, lamentó el periodista.
Entre los actos de acoso sufridos en el último mes, Tan Estrada aludió al momento de su salida, cuando fue obligado a desnudarse para la revisión de sus pertenencias durante su espera en el aeropuerto. El reportero también aseguró que un oficial de Migración le advirtió que, de regresar a la Isla, “iba a tener consecuencias grandes” y lo llamó “gusanito”.
En una publicación de Facebook, lamentó tener que pasar este 31 de diciembre lejos de su familia y su tierra, y subrayó que el régimen cubano lo había exiliado. “Mi periodismo, mis publicaciones en redes sociales y mis denuncias han golpeado su talón de Aquiles. La Seguridad del Estado, con sus métodos represivos, bajos y sucios, me ha obligado a abandonar Cuba en situaciones extremas y bajo amenazas”, lamentó.
Asimismo, aseguró que seguirá haciendo periodismo y “abogando” por la libertad de los presos políticos “sin cesar”.
El periodista, que fue acosado sistemáticamente en la Isla durante los dos últimos años, tuvo una de sus peores detenciones el pasado 26 de abril, cuando pasó varios días recluido en el cuartel general de la Seguridad del Estado, Villa Marista, en La Habana.
En esa ocasión, estuvo recluido en una celda de aislamiento y fue puesto en libertad con una multa de 4.000 pesos, tras amenazas.
Agentes de la Seguridad del Estado lo incitaron a irse del país y lo acusaron de interferir con el orden legal cubano.
