MIAMI, Estados Unidos. – Las autoridades de Santiago de Cuba anunciaron una reducción en la regularidad de ómnibus, ferrobuses y lanchas fuera del horario laboral en la provincia, una medida provocada por la escasez de combustible y la crisis energética que atraviesa la Isla.
Un reporte de la Agencia Cubana de Noticias (ACN) indica las medidas adoptadas para mantener las 109 rutas locales y las 101 intermunicipales en territorio santiaguero.
El coordinador de Transporte en el Gobierno provincial, Luis González, explicó que en zonas rurales las rutas establecidas tendrán solo una frecuencia semanal mientras desde la ciudad a la comunidad de Cayo Granma, en la bahía, habrá dos salidas diarias.
“Se consideró reforzar los medios móviles para la salida y el retorno a casa de trabajadores, estudiantes y niños que son trasladados a círculos infantiles o lugares dedicados al cuido”, señaló el funcionario.
Asimismo, González enfatizó la necesidad de retomar la implementación de la recogida a pasajeros en automóviles estatales para reducir las esperas y aglomeración de personas en lugares públicos.
Por su parte, el director de Transporte en Santiago de Cuba, Jaime Codorniú, reconoció que a las limitaciones del combustible se suma otra dificultad como la baja disponibilidad de medios.
En ese sentido, el dirigente afirmó que la movilidad en la ciudad está funcionando con apenas el 40% de sus medios debido a que el transporte restante carece de piezas de repuesto o está a la espera de lubricantes y mantenimiento.
El régimen cubano advirtió sobre la toma de medidas para contener la crisis en la Isla cuando el viceprimer ministro y ministro de Economía, Alejandro Gil, intervino en el programa Mesa Redonda del 27 de septiembre.
Gil expresó que las medidas adoptadas son el resultado de las importantes reuniones de la dirección del país con las autoridades de los territorios, basadas en las instrucciones emitidas por el primer ministro Manuel Marrero, sin pormenorizar cuáles serán, más allá de mayores restricciones en la asignación de combustible.
Además, el titular cubano apuntó que fuera del turismo como “fuente de ingresos”, el transporte para las demás actividades en la Isla será escaso, lo cual perjudicará el traslado de los trabajadores y estudiantes. Gil mencionó la posibilidad de retorno del trabajo a distancia como se aplicó durante la pandemia de COVID-19.
