SLP, México.- En diciembre, el Gobierno cubano anunció que eliminaría gradualmente los subsidios a la canasta básica que se distribuye a través de la libreta de abastecimiento. Este mes, apenas han llegado algunos productos a las bodegas cubanas y el arroz se vende a un precio muy superior al que tenía.
En respuesta a un sondeo de CubaNet que buscaba indagar por los alimentos que habían llegado a los establecimientos de cada ciudad, los cubanos coincidieron en que solo arroz y fósforo han vendido en la mayoría. El grano, además, se expende a 130 CUP por libra.
En Cienfuegos, según contó un internauta, vendieron dos libras de azúcar, dos libras de arroz, chícharos y dos cajas de fósforos.
En La Habana, en varias bodegas los cubanos tuvieron que comprar arroz a 130 pesos por persona, llegando a gastar 260 por las dos libras a las que tenían derecho.
“Cinco libras de arroz por un costo de 130 equivale a un tercio de la pención de un retirado, a veces da ganas de reírse cómo podemos ser tan sumisos y aguantones. Ellos solo aprietan y luego piden resistencia, ¿alguno de esos barrigones conoce el verdadero significado de esa palabra? Lo dudo, cuando tengan que subsistir con un salario de 1.500 y “duerman” sin corriente y cocinen con leña, entonces sí pueden pedir que resistamos”, escribió una persona.
En algunos puntos de venta, recibieron el arroz a 160 pesos por libra. La cantidad vendida varía, y ha llegado a ser de dos a cinco libras.
“En Centro Habana fue a 160 en un solo punto, por consejos, para varias bodegas y no alcanzó todo el mundo”, anotó una persona. “En Villa Clara dieron 5 libras por núcleo a 330”, opinó otra.
Un internauta de Sancti Spíritus refirió que a su bodega llegaron dos libras por persona y se vendieron a 140 cada una.
La eliminación gradual de los subsidios a la canasta básica apunta, según el régimen, a reorientar los subsidios hacia personas con mayores carencias La medida se da en medio de la aguda crisis económica que azota al país.
En comparecencia en diciembre, el primer ministro cubano Manuel Marrero indicó que ya se trabaja en el retiro de los subsidios a productos esenciales y advirtió que este proceso “no tiene marcha atrás”.
Aclaró, a su vez, que la implementación será progresiva y producto a producto, reconociendo, no obstante, las posibles tensiones sociales: “Un análisis que concluimos es el de eliminar totalmente el subsidio de la canasta básica, pero el tema es complicado porque no solo habría que subsidiar a personas en condición de vulnerabilidad. Prácticamente a la mayoría de los trabajadores presupuestados sus salarios no les permitiría cubrir esa diferencia”, dijo.
El funcionario admitió que las medidas tomadas hasta el momento no han satisfecho las expectativas ciudadanas. “Tenemos la insatisfacción de que no se ha avanzado lo necesario”, señaló, al presentar los resultados del plan gubernamental diseñado hace un año para atenuar las distorsiones económicas.
El panorama actual, marcado por una alta inflación y escasez generalizada, convierte en un desafío el acceso a alimentos básicos como arroz, azúcar, huevos y pan, cuyo costo supera con creces el salario promedio de la población.