Arequipa, perú.- Desde su debut hace más de 20 años en la gustada telenovela Doble Juego, hasta su paso por ¡Oh La Habana!, donde popularizó en Cuba la frase “Salsa, manguito y cerveza”, el actor Alejandro Socorro se ha convertido en uno de los rostros más reconocibles de la televisión en la Isla.
Nació el 5 de agosto en La Lisa, provincia La Habana, y su pasión por el arte se despertó temprano, gracias a las visitas al Teatro Nacional de Guiñol con su padre, el director artístico Eddy Socorro.
A los 14 años, Alejandro tuvo su primera actuación pública en la obra Liborio, la Jutía y el Majá junto a su papá, un recuerdo que atesora profundamente.
La fama le llegó en el 2002, con Doble Juego, donde desempeñó el papel de un adolescente mimado y mañoso, personaje emblemático para los televidentes cubanos. Según destaca, a pesar de que ha pasado mucho tiempo, las personas en la calle todavía lo reconocen por ese trabajo.
Otros créditos de Socorro en los medios de la Isla incluyen apariciones en telenovelas como La cara oculta de la Luna o Añorado encuentro, y su participación en el célebre policíaco cubano Tras la Huella.
Sobre su estilo actoral, el artista reveló que disfruta interpretando personajes negativos, habilidad que atribuye a sus experiencias en La Lisa, La Víbora y Centro Habana,. Lugares llenos de personajes pintorescos que le sirven de inspiración.
En el año 2015, el actor se trasladó a los Estados Unidos, dejando atrás su vida en Cuba. En una entrevista, contó que se mudó solo, con pocos amigos y poca familia con el fin de buscar un mejor futuro.
Lamentablemente, en el año 2022, enfrentó una tragedia personal cuando tuvo que denunciar la desaparición de su hermano, quien intentaba cruzar la frontera de México hacia Estados Unidos. Esta difícil experiencia lo llevó a reflexionar sobre la importancia de la familia y la vida.
En ese sentido, a principios de 2023, el artista cubano se reunió con su madre en Miami, lo que marcó un emotivo encuentro familiar después de varios años de separación.
Con relación a su carrera profesional en los Estados Unidos, Alejandro Socorro ha formado parte de varias producciones teatrales como Soldadito de Plomo, estrenada en abril de 2017 como parte del tercer Festival Internacional de la Escena LGBTQ+.
Además, en el año 2019 se involucró junto a la actriz Sabrina Olmedo en la obra Muertos y Revueltos, una divertida comedia dirigida por Yusnel Suárez.
Actualmente Socorro se muestra en redes sociales con el carisma y energía que lo caracterizan, siendo el orgulloso padre de un pequeño llamado Diego, al cual presume con frecuencia.
