Agentes de la Seguridad del Estado amenazaron al hijo del escritor y periodista Jorge Fernández Era para que este último deje de escribir en redes sociales.
Dos oficiales de la policía política interrogaron al joven en el campamento Toledo 2, donde cumple una condena, y le dijeron que lo trasladarían a una prisión de máxima seguridad en Guantánamo si no influía en su padre.
Fernández Era denunció en Facebook que su hijo “había sido retirado de la brigada de trabajo que de lunes a viernes labora en la Unidad de Patrulla de Tránsito de la PNR de Cinco Palmas, en San Agustín, decisión que concatena con los chantajes proferidos por Yordan desde el 28 de noviembre. Eduardo Luis lleva dos semanas sin salir de Toledo 2”.
El también editor, víctima del acoso frecuente de los cuerpos de la Seguridad del Estado, comunicó que ha seguido los procedimientos dictados para casos como este.
Inicialmente visitó el campamento donde está recluido su hijo buscando explicaciones. El segundo jefe de Toledo 2 se negó a explicar y aprobó el proceder de la policía política por ser un organismo superior del Ministerio del Interior.
Fernández Era también asistió a la Oficina de Atención a la Población de la Dirección de Establecimientos Penitenciarios donde le comunicaron que su hijo sería asignado a otra brigada el próximo año y que no constaba contra él ninguna medida disciplinaria.
El intelectual también realizó una denuncia contra la Seguridad del Estado en la Fiscalía Militar General.
“Una vez más, responsabilizo al Gobierno, al Partido Comunista de Cuba y a todas las instituciones cuya obligación es mantener la legalidad y defender los derechos de los ciudadanos a quienes se deben, por el daño físico y sicológico que pueda derivarse del proceder fascista que sigue tocando a mi puerta”, mencionó.
Su hijo Eduardo Luis ya ha sufrido represalias anteriores. Hace más de un año y medio al joven le sembraron un arma blanca en su puesto de trabajo como barbero dentro de la cárcel.
