La empresa Cubadeportes, encargada de la comercialización de productos y servicios en la Isla, lanzó un “súper ofertón” para los asistentes a los play-offs entre Los Leñadores de Las Tunas e Industriales de La Habana: la venta de palcos por 600 pesos, en lo cual se incluye una porción de pollo chiflado (frito), un pomo de refresco de litro y medio y medio litro de agua.
Hace dos años las autoridades anunciaron que abrirían los estadios a “mipymes y cooperativas” para “presentar proyectos enfocados en beneficios compartidos”, es decir, poder generar beneficios. Sin embargo, las “nuevas formas de gestión económica” no terminan de implantarse.
“Poco se ha hecho para revitalizar los servicios variados, al menos en el Latinoamericano”, publicó Swing Completo. “Durante los cuartos de final y las semifinales, la afición asistente notó la ausencia de una oferta gastronómica abundante durante los juegos”, agregó.
A lo largo de los partidos de la 62 Serie Nacional de Béisbol, los asistentes a la principal sede del béisbol de la Isla siguieron lamentando la falta de mejoras en la oferta gastronómica, que se limitaba a rositas de maíz, maní y rallado.
En febrero pasado, el vicepresidente del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (Inder), Omar Venegas Echemendía, anunció el paso del Estadio Latinoamericano a unidad presupuestada con tratamiento especial. El inmueble debería generar el 30% de su presupuesto y el otro 70% lo aportará el organismo deportivo.
Pero hasta la fecha no hay nada sobre nuevos servicios ni la tienda especializada en componentes deportivos ni existe información del proceso de vinculación entre el Estadio Latinoamericano con el turismo.
En la parte deportiva, este jueves los Leñadores vencieron 8-1 a Industriales, en lo que fue su tercer triunfo consecutivo. Están a una victoria de conquistar su segundo título en la Serie Nacional, el primero fue en la temporada 2017-2018.
Las Tunas, además, podrían alcanzar el campeonato por barrida –cuatro triunfos consecutivos–. Antes lo hicieron Pinar del Río (1997) bajo el mando de Jorge Fuentes, Santiago de Cuba (2000) con la batuta de Higinio Vélez, Industriales (2003 y 2004) con Rey Vicente Anglada, Santiago de Cuba (2008) dirigidos por Antonio Pacheco Masso y Granma (2017) con Carlos Martí.
El panorama luce oscuro para Industriales, que requiere de una remontada inédita. Hasta el momento nadie ha revertido un 0-3 en la historia beisbolera de Cuba.
“Todo es cuestión de tiempo para que empiece el festejo en la tierra de Vicente García. Sus leñadores, sin desesperarse, este 10 de agosto dieron un golpe mortal”, publicó el oficialista Cubadebate.
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