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Padre del Liberalismo Clásico: el legado de John Locke

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Padre del Liberalismo Clásico: el legado de John Locke
Padre del Liberalismo Clásico: el legado de John Locke

MIAMI, Estados Unidos. — En una humilde cabaña con techo de paja nació el el 29 de agosto de 1632 el filósofo y médico inglés John Locke. Inquieto, curioso y notablemente sabio desde niño, tras concluir su formación en la prestigiosa Westminster School, de Londres, obtuvo una beca para estudiar en el acreditado colegio Christ Church de Oxford, cuyo plan de estudios le pareció aburrido, reduccionista y obsoleto.

Aquella temprana decepción lo hizo volverse hacia el universo de la química, la medicina y la filosofía experimental, que se impartía en otras casas de altos estudios. Profundizó sus estudios de Medicina y colaboró con importantes científicos de la época, alternando esos saberes con su interés en el desarrollo del comercio y la economía internacional.

La obra del pensador Francis Bacon y el movimiento liberal británico tuvieron una fuerte influencia en las ideas políticas de Locke, quien escribió Dos tratados sobre el gobierno civil, obra considerada como un sólido argumento contra la monarquía absoluta y en defensa del consentimiento individual como base de la legitimidad política. Sus ideas sobre los derechos naturales y el gobierno fueron muy revolucionarias para la época, así como su espíritu antimonárquico, que lo hizo sospechoso de haber participado en la conspiración de Rye House, cuyo propósito era asesinar al rey Carlos II de Inglaterra.

Locke debió huir a los Países Bajos, donde permaneció por cinco años frecuentando el círculo de librepensadores y racionalistas inspirados en las ideas del filósofo Baruch Spinoza. Allí dispuso de tiempo suficiente para dedicarse al estudio y la escritura, y redactó su famosa “Carta sobre la tolerancia”.

Regresó a su patria luego de la Revolución Gloriosa. En aquel clima renovado, con el partido liberal ganando mayor protagonismo en la vida política, sus obras fueron editadas a toda prisa, en especial su Ensayo sobre el entendimiento humano.

Sus escritos influyeron en Voltaire y Rousseau, pensadores de la Ilustración Francesa, y también en los revolucionarios estadounidenses. Sus contribuciones al republicanismo clásico se reflejan en la Declaración de Independencia de los Estados Unidos, y la Declaración de Derechos de 1689.

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