El régimen cubano negó una nueva visita familiar al preso político José Daniel Ferrer, el pasado 6 de mayo.
Su esposa Nelva Ortega e hijos fueron a visitarlo durante el horario reglamentario de visitas familiares. Sin embargo, una vez más les fue negado el derecho a verlo, aceptando únicamente una jaba con alimentos y artículos de higiene.
“La dictadura Castro-Canel comunista se empeña hace un año y más de dos meses en mantenerlo no solo aislado de la comunidad penal sino también del contacto con su propia familia”, expresó Ortega en un audio difundido por el Observatorio Cubano de Derechos Humanos.
🔴 La esposa del líder de la UNPACU y preso político José Daniel Ferrer, Nelva Ortega, relata los hechos ocurridos durante la última visita a su esposo en la prisión Mar Verde, visita que, una vez más, le fue negada.#SOSCuba #LibertadParaLosPresosPoliticosCuba #CubaDeLuto #Cuba pic.twitter.com/YcHebzopsO
— Observatorio Cubano de Derechos Humanos (@observacuba) May 13, 2024
Denunció que Ferrer García permanece confinado en una celda de castigo y aislamiento desde el 14 de agosto de 2021, bajo condiciones “inhumanas, crueles y degradantes”, siendo víctima de maltrato físico y psicológico.
Asimismo, lamentó la falta de atención médica y dental que recibe su esposo, así como la pésima alimentación y el acceso limitado a agua potable que deben sufrir los reclusos.
Ferrer ha estado sometido a incomunicación constante en medio de condiciones inhumanas de reclusión.
A inicios de abril, su esposa, Nelva Ismaray Ortega, logró verlo en una breve visita a la prisión Mar Verde, en Santiago de Cuba.
El líder de la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu) se encuentraba mejor de salud con respecto al 18 de marzo, cuando su hija Fátima Victoria pudo verlo.
La Seguridad del Estado sigue presionando a Ferrer para que parta al exilio, contó el opositor a su esposa.
“Si no, tiene que acatar el tiempo que les dé la gana a ellos, incluyendo los 17 años de cuando la Primavera Negra”, refirió ella al medio antes citado.
En agosto de ese 2021 un juez revocó su arresto domiciliario y ordenó su ingreso en un establecimiento penitenciario para cumplir los 4 años y 14 días que le restaban de la condena que le habían impuesto en 2020.
Recientemente, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó preocupación por la situación del prisionero de conciencia. Mediante una resolución, esa entidad, da seguimiento a las medidas cautelares vigentes desde hace casi 12 años a favor de Ferrer y observa la situación actual de riesgo en la que se encuentra el opositor cubano.
