La poeta y periodista Tania Díaz Castro falleció este domingo en La Habana, a los 84 años, según informó Periódico Cubano, que no precisa la causa. El diario independiente CubaNet, donde colaboraba desde 1998, tampoco ofrece más detalles sobre las circunstancias de su deceso.
Considerada pionera del periodismo independiente en la Isla, nació en Camajuaní, Villa Clara, en 1939. Su padre, José Felipe Díaz –significado comunista en la época de Gerardo Machado y anticomunista cuando Fidel Castro ascendió al poder–, también fue periodista. Trabajó en la Biblioteca Nacional de Cuba y murió exiliado en Nueva York.
No fue el caso de Tania Díaz Castro, que abrazó la Revolución, ya viviendo en La Habana. Fundadora de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), en 1961, y de la Unión de Periodistas de Cuba (Upec), en 1963, en esos años empezó a trabajar como reportera para distintos medios oficialistas, así como a publicar sus primeros libros. En los años setenta, además, se desempeñó como guionista de radio.
Sin embargo, a finales de los años ochenta comenzó a oponerse al régimen. Ella formó parte, por ejemplo, del grupo que creó el Comité Cubano Pro Derechos Humanos, en 1987, que daría lugar, poco después, al Partido del mismo nombre.
Poco después, mediante chantaje, la obligaron a “retractarse” públicamente de su trabajo como periodista independiente y a hablar mal de los colegas que se dedicaban a esa actividad
“De pronto, como cosa del destino, en la casa número 365 de la calle Lealtad comenzaron a elevarse las voces de amigos, hablando un lenguaje distinto, sin miedo alguno, como si realmente tuvieran derecho a decir lo que pensaban, en medio de un pueblo callado, atemorizado, engañado vilmente de tan ingenuo”, contó ella misma en una crónica para CubaNet, que continúa: “Ese día, nuestras opiniones fueron expresadas en conferencias de prensa, escritas en papel para que el mundo nos escuchara, atendidas por periodistas de agencias extranjeras –France Presse y Reuters– y cubanas. Todos estaban asombrados por lo que ocurría en La Habana por primera vez en más de 30 años”.
Su disidencia no tardó en acarrearle el acoso y la represión de la Seguridad del Estado. Entre 1989 y 1990 estuvo encarcelada por haber firmado un documento que pedía a Fidel Castro la celebración de un plebiscito.
Poco después, mediante chantaje, la obligaron a “retractarse” públicamente de su trabajo como periodista independiente y a hablar mal de los colegas que se dedicaban a esa actividad.
En CubaNet se pueden leer sus colaboraciones hasta 2022.
El año pasado, en abril, el proyecto feminista Casa Palanca organizó una recaudación de fondos para “mejorar la calidad de vida” de una anciana Tania Díaz Castro, que vivía sola, con sus mascotas, en el reparto de El Roble, en el municipio costero de Santa Fe, La Habana.
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