La senadora Piedad Córdoba, del oficialista Pacto Histórico, murió este sábado, a los 68 años de edad, en la Clínica Conquistadores de Medellín a consecuencia de un infarto, según confirmaron varias fuentes, entre ellas el presidente Gustavo Petro. La política colombiana era una de las destacadas aliadas del régimen cubano en la región.
En 2017, en el Cementerio de Santa Ifigenia en Santiago de Cuba, Córdoba anunció ante el mausoleo que guarda las cenizas de Fidel Castro que se lanzaría a la carrera presidencial en Colombia, un proyecto que fracasó debido a que las urnas terminaron beneficiando en aquella ocasión al abogado Iván Duque.
En ese momento, Córdoba hizo una plegaria ante la tumba de Castro: “para que me ilumine con su energía y me dé la fuerza y la resistencia para una tarea que va a ser muy difícil”. Los medios oficiales cubanos se hicieron eco ampliamente de aquel ruego aunque, tras el fracaso electoral, el nombre de la senadora fue desapareciendo poco a poco de las primeras planas de la Isla.
Nacida en Medellín en 1955, la colombiana se cuenta entre las pocas personas que pudo visitar e interactuar con Fidel Castro tras la crisis de diverticulitis que lo obligó a abandonar el ejercicio público del poder en el verano de 2006 y delegar la presidencia a su hermano Raúl. En uno de esos encuentros, el ex gobernante cubano le regaló un ejemplar autografiado de su libro La victoria estratégica.
Sin embargo, la relación de la colombiana con el régimen cubano y sus aliados en la región venía de mucho antes. A inicios de este siglo, Córdoba, en esa época senadora por el Partido Liberal, sirvió de mediadora, junto con el entonces presidente venezolano, Hugo Chávez, para la liberación de varios secuestrados por la guerrilla de las FARC.
Por sus vínculos con la guerrilla colombiana, en 2010 el entonces procurador general, Alejandro Ordóñez, la destituyó e inhabilitó por 18 años
Por sus vínculos con la guerrilla colombiana, en 2010 el entonces procurador general, Alejandro Ordóñez, la destituyó e inhabilitó por 18 años para ejercer cargos públicos porque supuestamente había “promocionado y colaborado con el grupo al margen de la Ley, FARC”.
La investigación empezó a partir de los documentos hallados en las computadoras de quien fuera el número dos de las FARC, Luis Edgar Devia, alias Raúl Reyes, quien murió en un bombardeo de la aviación colombiana en Ecuador el 1 de marzo de 2008.
Córdoba estuvo unos años en la sombra pero tras anularse su condena volvió a la política atendiendo un llamado de Petro.
“Un procurador fascista la expulsó del Senado y se burló de sus electores, quise resarcir el daño y ayudé a que hiciera parte de la lista del Pacto Histórico, sentí que lo merecía”, agregó este sábado el presidente.
En enero de 2023, el Gobierno colombiano extraditó a Estados Unidos a Álvaro Córdoba, hermano de la senadora. El familiar de Piedad estaba solicitado por una corte de ese país por delitos relacionados con narcotráfico.
El Gobierno colombiano aprobó la extradición del hermano de Córdoba, requerido por la Corte del Distrito Sur de Nueva York “por el cargo de concierto para importar narcóticos”.
Hasta la tarde de este sábado, la prensa oficial cubana, solo había publicado un discreto obituario de Córdoba, aunque se espera que en las próximas horas el homenaje de La Habana se exprese en mensajes institucionales.
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