SAN LUIS POTOSÍ, México.- Alexis Triana, presidente en Instituto de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC), junto a otros funcionarios, llegaron este lunes a Moscú para buscar “apoyo” de la televisión rusa para producir filmes en la Isla y mostrar en las plataformas de Rusia creaciones cubanas.
El presidente del ICAIC, en distintas publicaciones de Facebook donde deja constancia de su periplo, indicó que tuvieron jornadas de trabajo “muy intensas”.
En primer lugar, en los estudios de la televisión rusa Mosfilm, se entrevistaron con Svetlana Pileva, subdirectora general, para hablar de la probabilidad para “recibir apoyos” en el filme Teófilo, de Alejandro Gil, que entrará en producción próximamente.
También asistieron a la sede y sala de trasmisión de la agencia RT en Español, donde invitaron a su directora, Victoria Vorontsova, a presentar dos de sus documentales en el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano y coproducir junto a Cubacine ICAIC el documental Subir al cielo, de Jorge Fuentes.
Con los directivos de Soyuzmultfilm, Boris Mashkovtsev y Maiya Nobokrechenova, plantearon la posibilidad de recibir talleres y clases magistrales de dibujos animados en noviembre, durante las Jornadas de Cultura Espiritual Rusa.
Por otra parte, y sin perder oportunidad, debatieron con la directora general de TV BRICS, Janna Tolstikova, “sobre alianzas mutuas y las posibilidades reales para difundir nuestro patrimonio fílmico y los documentales y filmes cubanos de hoy en sus plataformas digitales”.
Se fortalecen las alianzas
Los represores castristas, que actualmente se encuentran en San Petersburgo en el X Foro Internacional de Culturas Unidas, donde también está el ministro de Cultura Alpidio Alonso, son emisarios del régimen con la misión de acercarse a uno de sus aliados más poderosos.
El fortalecimiento de los vínculos entre los regímenes de Rusia y Cuba, ahora enfocado en la televisión rusa, ha sido evidente en los últimos años, con iniciativas que abarcan desde la apertura de líneas de crédito para la compra de productos esenciales hasta el envío de donaciones y el permiso de que la Isla adquiera trigo, petróleo y fertilizantes de origen ruso.
En el ámbito educativo y cultural la cercanía también se hace patente. Este año, los ministerios de Educación de ambos países acordaron estrechar los vínculos entre los sistemas docentes de ambos países, lo cual se concretará, entre otras acciones, con el envío de profesores de ruso a la Isla y el desarrollo conjunto de libros de texto en ese idioma.
Los funcionarios castristas discutieron la implementación del proyecto humanitario internacional “Maestro de ruso en el extranjero”, que llevará a docentes de ese idioma a la Isla por vez primera en décadas.
“Interactuamos con el Ministerio de Educación de Cuba en varias áreas. Al margen del foro en Kazán, se firmó un convenio para el desarrollo del proyecto ‘Profesor Ruso en el Exterior’, en el marco del cual se prevé el envío de dos profesores rusos a Cuba por primera vez este curso académico. Anteriormente, también acordamos crear un grupo de trabajo interdepartamental sobre cooperación”, declaró Gribov.
Asimismo, el viceministro señaló la importancia de implementar programas para el intercambio de experiencias entre profesores rusos y cubanos y las perspectivas de cooperación en el campo de la educación profesional secundaria.