SAN LUIS POTOSÍ, México.- Sérgio Mendes, pianista brasileño de bossa nova que ayudó a popularizar el género en los años 60 y realizó giras con Herb Alpert y Frank Sinatra, falleció el jueves 5 de septiembre a sus 83 años, según confirmó su familia en las redes sociales del músico.
El artista murió “pacíficamente” en Los Ángeles, y en sus últimos momentos estuvo acompañado por su esposa y compañera musical durante los últimos 54 años, Gracinha Leporace Mendes, y sus hijos.
La declaración no reveló una causa de la muerte, pero dijo que la salud del cantante se había visto afectada por los efectos del coronavirus.
“Mendes, uno de los artistas brasileños de mayor éxito internacional de todos los tiempos, grabó más de 35 álbumes, muchos de los cuales alcanzaron el disco de oro o de platino. Mendes, tres veces ganador del premio Grammy y nominado al Oscar, nos deja un increíble legado musical de más de seis décadas de un sonido único que mostró por primera vez con su banda Brasil ’66”, refirió el texto.
Nacido en 1941 en Niterói, cerca de Río de Janeiro, se convirtió en un pianista popular en los clubes nocturnos del Beco das Garrafas (Callejón de las Botellas) de Río, un grupo de locales donde los artistas interpretaban el género emergente de la bossa nova mientras los vecinos lanzaban botellas a los alborotadores.
La bossa nova mezclaba los ritmos de la samba brasileña con el jazz estadounidense. Junto a colegas como el compositor Antônio Carlos Jobim, el cantante y guitarrista João Gilberto, el letrista Vinícius de Moraes y el guitarrista Roberto Menescal, la música captó la sensual cultura playera de la ciudad y su ambiente joven y esperanzado de finales de los 50 y principios de los 60, un sonido evocado con cariño en la película de 1959 “Orfeo negro”.
Mendes grabó su primer álbum en solitario Dance Moderno en 1961, una colección de versiones de jazz de Duke Ellington y Cole Porter junto a composiciones brasileñas de Jobim y Gilberto.
Rápidamente empezó a hacer giras por Estados Unidos y actuó en un legendario concierto en el Carnegie Hall de Nueva York en 1962, que mostró la bossa nova para el público novato estadounidense. Aquel espectáculo contribuyó a que el movimiento causara sensación en todo el mundo, y éxitos como “La chica de Ipanema” de Gilberto y Stan Getz, en 1964, pronto se convertirían en elementos básicos del jazz y el pop.
Fue también mundialmente conocido por una versión de la canción “Más que nada” de Jorge Ben Jor, onde mezclaba samba y jazz.
Mendes siguió grabando durante los años setenta y ochenta, y en 1983 alcanzó gran fama con su versión contemporánea para adultos de la canción Never Gonna Let You Go, de Barry Mann y Cynthia Weil. En 2006, publicó el álbum de regreso Timeless, producido por will.i.am, de los Black Eyed Peas.
El álbum, con apariciones de Erykah Badu, Q-Tip, Stevie Wonder y Justin Timberlake, reflejaba los numerosos discos de rap underground que sampleaban la música de Mendes.
El brasileño ayudó a producir la música de las películas de animación Rio y Rio 2, y fue nominado al Oscar a la mejor canción original en 2012 por “Real in Rio”.
También ganó un Grammy al mejor álbum mundial por Brasileiro en 1992. Siguió actuando hasta el año pasado, y su álbum más reciente, In the Key of Joy, se publicó en 2020.
