El petrolero Ocean Mariner, que navega con bandera de Liberia, llegó este viernes a la bahía de La Habana procedente del puerto mexicano de Pajaritos, en Veracruz. Aunque el complejo petroquímico de donde zarpó el tanquero negó tener datos sobre la carga, uno de sus trabajadores aseguró a 14ymedio que viaja con alrededor de 100.000 barriles de combustible que entregará en la Isla.
Este diario estuvo presente en el puerto habanero durante la llegada del buque, a las 19:30 horas de este viernes. Una lancha con un práctico guió al barco a través de la bahía hasta la refinería Ñico López, donde echó anclas.
“El barco va con menos de un tercio de lo que se mandó en el Delsa“, expuso el operario de Pajaritos, aludiendo al tanquero con bandera cubana que descargó 350.000 barriles de crudo el pasado junio en la capital cubana, una operación que fue denunciada como “fraudulenta” por el periodista mexicano Gerardo Aburto. La carga del Ocean Mariner: “Diésel o gasolina”, asegura el trabajador.
La información sobre los envíos del monopolio estatal Pemex a la Isla, concluye, está controlada estrictamente por la Secretaría de Marina, que responde directamente al Gobierno del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador. Como ya ocurrió con el viaje del Delsa, las autoridades mexicanas han mantenido en secreto cualquier información sobre el trayecto o el contenido que transporta el tanquero.
El pasado 17 de junio, Aburto acusó al Ejecutivo mexicano de “regalar crudo al Gobierno opresor de Cuba”, desviando recursos estatales. Dos meses después, en agosto, la agencia británica Reuters reveló que López Obrador había enviado a La Habana hasta dos millones de barriles de petróleo –13.000 barriles por días (bpd)– en los últimos cuatro meses, una cifra que coloca al país azteca en el segundo lugar de la lista de socios petroleros de La Habana, entre Venezuela y Rusia.
México suele suministrar crudo ligero Olmeca, según Reuters, una variedad que “se adapta mejor a las antiguas refinerías de Cuba que el petróleo pesado de Venezuela”. La mayoría de los cargamentos vienen en los buques Vilma y Delsa, ambos con pabellón cubano y no sancionados por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
Desde julio, detalla Reuters, el Vilma, anteriormente usado para transportar crudo venezolano a la Isla, ha hecho dos viajes desde la terminal de Pajaritos, en Veracruz, a las refinerías de Cienfuegos y La Habana. Desde el mismo puerto veracruzano y también a Cienfuegos llegó con petróleo el Delsa en junio, antes de proseguir viaje a Venezuela, donde, según la agencia británica, cargó crudo igualmente.
La nota menciona que otros barcos cubanos han sido reparados o inspeccionados en los últimos años en un astillero en Veracruz, entre ellos el Esperanza, incluido en la lista negra de Estados Unidos, que actualmente se encuentra allí. En resumen, como titula el texto de Reuters, los petroleros de la Isla son “visitantes habituales” de puertos mexicanos.
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