Tiempo de lectura aprox: 2 minutos
Con el propósito final de garantizar desde el área técnica y de gestión integral de los sistemas de cuencas hidrográficas el acceso de la población y entidades a fuentes seguras de agua, prácticamente concluye la primera fase del proyecto de colaboración entre la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (Jica) y el Instituto Cubano de Recursos Hidráulicos (INRH).
Jica ha desarrollado varios proyectos de cooperación con la isla en este campo desde hace unos 20 años, con labores dirigidas fundamentalmente a la investigación y estudios locales.
El proyecto fortalecerá la gestión integrada de los recursos hidráulicos en seis acuíferos de las provincias de Artemisa, Mayabeque y La Habana, y buscará mediante el uso de datos científicos aumentar la precisión de los planes de asignaciones y uso adecuado del agua en esa zona.
Además, prevé el perfeccionamiento de la gestión del agua con el monitoreo, el fortalecimiento del consejo de cuencas hidrográficas en la región y la implementación de nuevas maneras de hacer a partir de la experiencia japonesa y de nuestros especialistas.
Al valorar los actuales trabajos Harou Yamane, líder del proyecto por la parte del país asiático, enfatizó en conferencia de prensa en La Habana que para lograr los propósitos previstos se necesita un balance adecuado de agua, con vistas a priorizar un suministro óptimo en función de satisfacer las demandas de poblaciones y entidades de la economía en los territorios incluidos.
El imprescindible equilibrio en el suministro requiere, dijo, el fortalecimiento de las infraestructuras y el ahorro, y refirió que la investigación identificó al sector de la agricultura como máximo consumidor de agua en la zona que cubre el proyecto, así como un bajo conocimiento de los campesinos en torno a los conceptos del riego eficiente y la cantidad de agua que requiere cada cultivo, “por lo que urge concientizar a los usuarios sobre estos temas”, subrayó.
Entre otros aspectos, el experto japonés significó el avanzado sistema de gestión de las cuencas hidrográficas en las zonas concebidas en los estudios conjuntos desarrollados con al Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos de la isla, lo que coadyuvó a la ejecución del proyecto.
Fermín Sarduy Quintanilla, director de Relaciones Internacionales y Colaboración del INRH, precisó que el pilotaje en esta primera fase incluye también la capacitación de los encargados de manejo de nivel de cuenca, la actividad agrícola y la población para propiciar el uso eficiente y racional del agua, y con vistas a extenderlo luego al resto del país.
Como resultado de ello, indicó, se promovieron cursos de formación para técnicos cubanos en Japón a fin de fortalecer áreas de actuación del proyecto como el riego eficiente y la seguridad del abasto.
Yosmary Gil Leal, responsable por la parte cubana del proyecto, destacó que en estos momentos se inicia la segunda fase de acción luego del diagnóstico inicial, el cual permitió identificar además una serie de problemáticas que se pretende revertir en el lapso comprendido hasta el año 2027.
Explicó que la elección de estos territorios responde a la presencia de las cuencas fundamentales que abastecen del preciado líquido a la capital y ha incluido la donación por la parte japonesa de equipos de medición y la habilitación de las herramientas informáticas necesarias para mapear la situación.
Luego de esta fase procederá una tercera etapa consistente en actualizar el Esquema Hidrológico Nacional, el cual data de la década de los 90 del siglo pasado y no recoge temas como los impactos del Cambio Climático y la sequía, entre otras cuestiones.
Visitas: 15
