MIAMI, Estados Unidos. – Científicos cubanos se encuentran actualmente trabajando en la conservación del fósil de un saurio gigante descubierto recientemente en una cueva del Valle de Viñales, de acuerdo con el reporte de la agencia estatal de noticias Prensa Latina.
El descubrimiento, según expertos, marca uno de los hitos más importantes de la paleontología cubana.
El doctor en Ciencias Geológicas Manuel Iturralde Vinent informó que se ha completado exitosamente la fotogrametría en 3D del sitio, donde se encuentra el esqueleto petrificado del ictiosaurio. Este reptil marino, de unos cuatro metros de longitud, se caracteriza por su semejanza con los delfines, aunque posee un pico más largo y dientes más agudos.
Además, se ha realizado una cartografía completa de la cueva, conocida como el surgidero del río del Novillo.
La roca que alberga este fósil está compuesta por caliza y presenta una estructura de láminas superpuestas. Debido a la humedad y los cambios de temperatura, estas láminas han comenzado a desprenderse, lo que llevó a que el esqueleto, inicialmente oculto en la roca, quedara expuesto. Sin embargo, existe la preocupación de que este proceso continúe y provoque la pérdida de los restos fósiles.
La técnica de fotogrametría empleada en este proyecto es especialmente novedosa para Cuba, ya que es la primera vez que se aplica a restos fósiles en el país. “Es un gran paso de avance para la ciencia nacional”, señaló Iturralde.
Esteban Rubén Grau, vicepresidente de la Sociedad Espeleológica de Cuba, destacó la importancia de esta técnica moderna, que permite obtener imágenes tridimensionales de alta resolución de objetos de especial interés, facilitando el estudio detallado del esqueleto sin la necesidad de adentrarse en la peligrosa caverna.
Los especialistas han identificado al esqueleto petrificado como un posible Ophthalmosaurio, un ictiosaurio que habitó en el mar Caribe primitivo al final del periodo Jurásico, hace entre 145 y 150 millones de años. Este hallazgo representa una antigüedad nunca antes encontrada en restos identificables de este tipo de reptiles marinos en Cuba y se distingue por ser el primer esqueleto de un saurio de gran tamaño en el país que ha preservado numerosos huesos articulados.
Paralelamente a las labores de investigación, los científicos buscan detener el proceso natural de desprendimiento de la roca para evitar la pérdida de este invaluable ejemplar paleontológico.
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