Las sombras de la brutalidad y la violencia se ciernen una vez más sobre la isla de Cuba. En un escalofriante episodio que ha conmocionado a la provincia de Las Tunas, un joven cubano de 27 años fue brutalmente asesinado a machetazos el pasado viernes en la comunidad del 10 de Macagua, carretera central.
Los informes provenientes de las redes sociales detallan que el horrendo crimen tuvo lugar frente a una raspadurera, donde la víctima, cuya identidad aún permanece en la penumbra, desempeñaba sus labores cotidianas. El fatídico desenlace ocurrió tras un robo perpetrado en la residencia del propietario de la mencionada raspadurera.
[Asi me lo envian asi lo subo Cuba es una carniceria se estan matando entre cubanos ]:Hola saludos grupo esto sucedió ase una hora en las tunas en la comunidad del 10 de Macagua carretera central el muchacho estaba trabajando en una rraspadurera frente a la casa del dueño lo… pic.twitter.com/53p1WYcBj0
— Glenda Rancaño (@rancanoglenda7) November 17, 2023
“Lo que sucedió fue que le robaron al dueño de la raspadurera, o sea en su casa, (los delincuentes) se movilizaron rápido y salieron”, denunció un testigo de los hechos.
Los criminales, después de cometer el robo, se dispersaron y uno de ellos se encontró de frente con el joven en unas lomas detrás de la vivienda saqueada. La respuesta del agresor fue despiadada: atacó al joven con machetazos, infligiéndole heridas mortales que lo dejaron sin vida en el mismo lugar del crimen. “Lo dejó degollado, le picó los brazos, manos y el cráneo se lo abrió en dos tapas”, relató el denunciante, con un tono de indignación y horror palpable.
Este espeluznante incidente ha avivado el reclamo de la población por un cambio inmediato ante el creciente índice de delitos violentos en la isla. El denunciante, consternado por la tragedia, sostiene que Cuba precisa una transformación urgente para evitar más pérdidas como la de este joven trabajador.
“A mis amistades aquí, yo vivo cerca de dónde pasó esto; los quieren meter presos por animales perdidos y ventas que ellos tuvieron que hacer para poder comprar qué comer, por el mal trabajo de ellos. Les están cobrando este maldito Estado, 250,000 pesos, por los animales robados y mal trabajo”, añadió la denuncia, subrayando la situación precaria que enfrentan algunos ciudadanos y la respuesta desmedida de las autoridades.
En medio de este oscuro panorama, la sociedad cubana clama por medidas efectivas que pongan freno a la escalada de violencia y garanticen la seguridad de sus ciudadanos.