El tanquero Vilma, que navega con bandera cubana y una carga aproximada de 410.000 barriles de petróleo, ya zarpó hacia a Cuba desde el puerto mexicano de Pajaritos, en Veracruz, donde llevaba anclado más de una semana. Otro buque procedente de México, el Fortunato, también descargó en el puerto de Moa (Holguín) una cantidad considerable de Gas Licuado de Petróleo (GLP), según informó a este diario el experto del Instituto de Energía de la Universidad de Texas Jorge Piñón.
Ambos envíos coinciden con una polémica sobre los envíos de petróleo de México a la Isla, que ha llegado a un punto álgido este martes, luego de que el banco de Exportaciones e Importaciones de Estados Unidos (Exim) negara haber cancelado un crédito de 760 millones de dólares a la estatal mexicana Pemex por enviar crudo a Cuba.
Pese a que las aplicaciones de rastreo marítimo indicaban que el Vilma estaba listo para viajar a Cuba, la prensa oficial y varios activistas afines al régimen criticaron la “medida” de Exim. “México osó enviarle petróleo a Cuba, el petróleo que mueve las ambulancias, el petróleo que da electricidad a los hogares cubanos, el petróleo que sirve para los hospitales”, dijo a Prensa Latina Carlos Lazo, coordinador de la organización procastrista Puentes de Amor.
La respuesta de Exim, este martes, fue tajante: “Algunos medios de comunicación han informado incorrectamente de que Exim canceló un financiamiento previamente aprobado para Pemex. Estos informes son falsos”. La entidad asegura que el crédito, en realidad, nunca llegó a tener el visto bueno, aunque remitió a la petrolera para dar ese tipo de detalles.
Este miércoles, las aplicaciones de rastreo de barcos mostraban la presencia de otros tanqueros anclados en la costa de la Isla
Este miércoles, las aplicaciones de rastreo de barcos mostraban la presencia de otros tanqueros anclados en la costa de la Isla. Además del Fortunato, que llegó a Moa el 6 de octubre procedente de Pajaritos y zarpó hace pocos días rumbo a Kingston, Jamaica, figuran –también en Moa– el Primula, procedente de Matanzas y, con fecha de llegada para el próximo 13 de octubre, y el Prairie Tulip, que viene de Curazao.
México se está convirtiendo, desde hace meses, en uno de los principales suministradores de crudo a la Isla. Según cálculos hechos por Piñón antes de las últimas entregas, los envíos rondan los 2,8 millones de barriles, por un valor de aproximadamente 200 millones de dólares. Solo entre junio y julio llegaron a la Isla dos tanqueros, con 350.000 y 700.000 barriles respectivamente, de acuerdo con los datos de información portuaria y movimientos de barcos realizados. Los envíos, según la canciller mexicana Alicia Bárcena, se hicieron a través de la Agencia de Cooperación Internacional para el Desarrollo.
Varias personalidades, como la congresista cubanoamericana María Elvira Salazar, habían felicitado a Exim por su decisión y exhortaban a seguir con Pemex las mismas políticas de presión utilizadas con la estatal venezolana Pdvsa.
En cuanto a Pemex, su director, Octavio Romero llegó a negar que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador realizara “donaciones” a Cuba. “Petróleos Mexicanos no ha realizado ningún donativo de combustibles a ningún Gobierno extranjero. No miento”, declaró a una diputada.
A pesar del trasiego frecuente de barcos por los puertos cubanos, la crisis de combustible está en su peor momento y las previsiones del Gobierno en materia de energía no son optimistas. Este miércoles, en su habitual parte diario, la Unión Eléctrica anunció un déficit de 903 megavatios (MW), lo cual se traducirá en afectaciones de 973 MW, provocando apagones más largos en el horario pico.
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