AREQUIPA, Perú – El viceprimer ministro cubano, Ricardo Cabrisas, recientemente destituido de su cargo al frente del Ministerio del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, sostuvo encuentros con representantes de empresas rusas en la que supone su segunda vista al país eslavo en dos meses.
Se trata de Inter RAO Export y Hevel Group, indica un reporte del medio oficial Cubadebate, empresas con las que el régimen cubano trabaja en proyectos para incrementar la eficiencia en la generación de energía eléctrica y el desarrollo de las fuentes renovables de energía.
Los encuentros con las compañías rusas cobran especial relevancia para la dictadura castrista en el contexto actual de la Isla, cuando el país atraviesa por una severa crisis económica y energética marcada por la falta de combustible, y los apagones eléctricos diarios que pueden durar hasta 20 horas.
Según trascendió, Cabrisas asistió al concierto que organiza la empresa rusa Rosneft en el marco del Foro Económico Internacional de San Petersburgo, donde intercambió con la presidenta del Consejo de la Federación de Rusia, Valentina Matvienko, y el Director Ejecutivo Principal de la mencionada Compañía, Igor Sechin.
Como parte de su agenda en suelo ruso, el funcionario castrista debe asistir a paneles temáticos, encuentros con autoridades gubernamentales y otros representantes de empresas.
De acuerdo con una nota del Consejo de la Federación de Rusia, tras su llegada a Moscú el pasado 4 de junio, Cabrisas se reunió con el vicepresidente del Consejo de la Federación, Konstantin Kosachev, para estrechar vínculos e indagar en las posibles áreas de cooperación, en un intento por atraer inversores rusos a Cuba para desarrollar “nichos prometedores del mercado cubano”.
Cabrisas, que ha fungido como negociador de las deudas de La Habana con el Club de París y otros países de quienes el régimen cubano es deudor, fue nuevamente el enviado para abordar la ampliación de la colaboración entre los regímenes de La Habana y Moscú y explorar nuevas áreas de oportunidad.
Entre otros, trataron asuntos relativos a la economía, turismo, vínculos culturales y humanitarios, incluida la educación de los cubanos en instituciones de educación superior rusas y la apertura de una sucursal del Museo Ruso en La Habana.
Según expuso Ricardo Cabrisas en las conversaciones, las relaciones bilaterales “van en aumento” y a su vez, expuso “su visión” sobre la situación socioeconómica cubana.
Con estos eventos, el gobierno ruso busca salir del ostracismo en que ha quedado desde el inicio de la invasión a Ucrania.
Cabrisas, que también viajó en marzo a Rusia acompañado por Juan Carlos García Granda, ministro de Turismo, fue destituido a finales de mayo de sus responsabilidades como ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera.
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