El ministro del Comercio Exterior y de la Inversión Extranjera, Ricardo Cabrisas, artífice del acercamiento entre el Kremlin y La Habana, viajó este miércoles a Moscú para pactar nuevos acuerdos que oxigenen la anémica economía cubana. Los planes discutidos con su homólogo ruso, el vice primer ministro Dmitri Chernishenko, incluyen la promesa de un chorro de inversiones que, como de costumbre, fluirán en una sola dirección: de Rusia hacia la Isla.
Según la agencia rusa Sputnik, en la reunión, donde también estuvo el consejero empresarial del Kremlin, Boris Titov –que viajó el pasado octubre a La Habana–, y funcionarios del Banco Central de Cuba, se abordaron varias estrategias para reafirmar las alianzas bilaterales y conseguir más inversiones.
“El rumbo prioritario para el desarrollo de las relaciones económicas bilaterales debería ser la creación de condiciones favorables para las inversiones rusas en la economía cubana”, insistió Chernishenko, sin revelar claramente qué “condiciones” espera que la Isla cumpla para que sea merecedora de los fondos del Kremlin.
Hasta ahora, los acuerdos, algunos ya encaminados, asegura Sputnik, abarcan inversiones en el sector energético
Hasta ahora, los acuerdos, algunos ya encaminados, asegura Sputnik, abarcan inversiones en el sector energético, con la construcción de parques fotovoltaicos en la Isla, la elaboración de fertilizantes, y otros “proyectos de infraestructura” que no especificaron.
También se hizo mención a la puesta en funcionamiento de “una empresa agroindustrial de ciclo completo para el cultivo y procesamiento de la caña de azúcar”. No aclaran, sin embargo, si se trata del central Uruguay, ubicado en Jatibonico (Sancti Spíritus), bajo gestión rusa desde hace al menos un año.
En materia energética, Moscú también había prometido contribuir a la creación de nuevas “capacidades” en las termoeléctricas cubanas, por lo que es probable que los acuerdos que involucran al sector continúen por esa línea.
El turismo, otro de los renglones que La Habana se empeña en mejorar a pesar de que los rusos muestran poco interés por viajar a la Isla, también ha sido tema de debate de la comisión, que asumió como un logro la visita de unos 60.000 turistas de este país en los primeros seis meses de 2023.
El Ministerio de Transporte de Rusia anunció que pretende aumentar a 10 las frecuencias semanales de vuelos entre ambos países
Con el propósito de incentivar el flujo de viajeros, el Ministerio de Transporte de Rusia anunció que pretende aumentar a 10 las frecuencias semanales de vuelos entre ambos países para finales de este año.
A pesar de que no queda claro qué beneficios obtiene Moscú de La Habana a cambio de las inversiones del Gobierno y algunos empresarios rusos, lo cierto es que ambas partes se esfuerzan en demostrar la buena salud de sus relaciones y su alineamiento ideológico en la esfera internacional.
Por detrás de Venezuela y México, Rusia sigue siendo uno de los mayores suministradores de petróleo a la Isla. También ha realizado numerosas donaciones a través de organismos internacionales, como la entrega de 650 toneladas de aceite el pasado septiembre o la “ayuda” de cuatro millones de dólares para un centro internacional de bomberos, pocos días después del derrumbe de un edificio familiar en La Habana Vieja.
Sin embargo, Sputnik no dijo ni una sola palabra sobre la presencia de cientos de cubanos que trabajan como mercenarios para el Ejército ruso en la invasión a Ucrania, presuntamente a cambio de obtener la ciudadanía y varios miles de rublos, ni de las implicaciones diplomáticas y económicas entre ambos Estados de este asunto polémico. Si en algo han estado de acuerdo Moscú y La Habana, después de que trascendieran imágenes de los soldados cubanos en el frente de batalla, es en guardar silencio.
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