Oficiales del Instituto Nacional de Migración (INM) en Tapachula, México, intentaron extorsionar a 13 migrantes cubanos que viajaban en una caravana hacia el norte de México, denunciaron varios reportes de medios locales este fin de semana.
Según el testimonio de Zuselmi García López, una de las cubanas afectadas, los agentes del INM los detuvieron en el ejido Viva México y les exigieron 1,500 pesos mexicanos a cambio de devolverles los pasaportes que les habían confiscado.
Los migrantes cubanos se negaron a pagar y reclamaron sus documentos, argumentando que querían seguir en la caravana y regularizar su situación otro sitio. Ante la presión de la Guardia Nacional y los medios locales, los oficiales del INM tuvieron que entregar los pasaportes y dejar pasar a los cubanos, sin cobrarles nada.
“Nos pararon aquí porque quedamos atrás en la caravana y cogimos una combi para adelantar y esperarlos acá, y nos pararon aquí y nos quitaron los documentos. Nos dijeron que no los iban a dar porque nos iban a poner un transporte hasta Tuxtla, para allí hacernos los papeles legales para seguir. Les dijimos que no, que queríamos seguir en la caravana, y no nos lo querían dar”, contó la cubana.
Migrantes cubanos en Tapachula, México
La situación de los migrantes en Tapachula, la ciudad fronteriza con Guatemala, es crítica. Miles de personas de distintas nacionalidades están atrapadas en esta localidad, esperando que las autoridades mexicanas les otorguen una regularización migratoria que les permita solicitar una cita CBP One, el requisito para entrar legalmente a Estados Unidos.
Sin embargo, el proceso es lento y burocrático, y muchos migrantes llevan meses sin obtener una respuesta. Mientras tanto, tienen que enfrentarse a las condiciones precarias de alojamiento en Tapachula, donde los precios son elevados y el espacio es escaso. Algunos llegan a compartir un cuarto con otras nueve personas.
Además, en octubre se reanudaron los vuelos de deportación desde México, y varios cubanos que fueron devueltos a la isla denunciaron que las autoridades migratorias mexicanas no respetaron su estatus ni su cita CBP One. Estos vuelos se suspendieron a finales de año, por falta de recursos del Instituto Nacional de Migración (INM). Debido a ello, muchos cubanos optaron por seguir el camino en caravana.