El primer ministro de Cuba, Manuel Marrero, informó esta semana ante la Asamblea Nacional del Poder Popular sobre la introducción de un nuevo régimen cambiario que, según sus declaraciones, será más flexible y responderá a las condiciones de oferta y demanda.
El gobernante destacó que la tasa de cambio se actualizará diariamente y aseguró que este nuevo enfoque busca competir con el mercado informal, donde se concentra la mayor parte de las transacciones de divisas en el país.
“El objetivo es incentivar a los ciudadanos a vender sus divisas en el sistema bancario oficial”, señaló Marrero, quien enfatizó que esto podría contribuir a fortalecer las reservas estatales.
Aunque no se anunció una fecha exacta para la implementación ni se reveló la tasa inicial, las autoridades esperan que la medida ayude a reducir la brecha entre el mercado oficial y el informal, donde la cotización del dólar supera los 300 pesos cubanos (CUP).
Críticas de economistas al supuesto «nuevo régimen cambiario»
Sin embargo, el economista cubano Pedro Monreal expresó dudas sobre la verdadera naturaleza de este cambio.
Según Monreal, la medida anunciada no representa un régimen cambiario realmente nuevo ni una flexibilidad sin precedentes, como sugiere el gobierno. “Se mantiene esencialmente un régimen de tipo fijo, con variaciones en el componente secundario para el sector población y no estatal”, afirmó en sus redes sociales.
El experto recordó que desde agosto de 2022 ya se había implementado una tasa «flexible» de 1 USD=120 CUP para estos sectores, lo cual se presentó entonces como un tipo de cambio «económicamente fundamentado».
Sin embargo, la falta de claridad sobre cómo variará esta nueva tasa ha generado incertidumbre. “No queda claro si sería una flotación limpia, donde el mercado opera libremente, o una flotación sucia, con intervención estatal”, subrayó.
Finalmente, el economista cubano señaló que el uso del término “tasa flotante” podría generar confusión. “Esto parece ser más una estrategia para recaudar divisas estatales que un mercado cambiario en el sentido clásico”, concluyó.
10/15 El aspecto que, en principio, haría muy similares las reglas flexibles de agosto de 2022 y las de diciembre de 2024 es su eventual funcionamiento más como un mecanismo “recaudador” de divisas que como un mercado cambiario con equilibrio en compra y venta de divisas
— Pedro Monreal (@pmmonreal) December 19, 2024
