Los presos políticos cubanos José Antonio Pompa López y Lázaro Mendoza García, recluidos en la prisión de máxima seguridad Combinado del Este, no han recibido atención médica a pesar de presentar severos problemas de salud.
Ambos reclusos están en condiciones de salud críticas, lo que podría poner en riesgo su vida, de acuerdo con información proporcionada por Suarmi Hernández Vilar, esposa de Pompa López, a CubaNet.
José Antonio Pompa López está experimentando unos dolores en los riñones que, según su esposa, son insoportables, sin embargo, las autoridades penitenciarias le han negado el acceso a cualquier tipo de tratamiento.
Por su parte, Lázaro Mendoza García presenta sangrado por la nariz y el ano, además de sufrir desmayos espontáneos.
Esta situación ha sido reportada sin que, hasta el momento, se les haya proporcionado a los reos la atención médica adecuada.
“Temo por sus vidas porque los están matando lentamente. Están enfermos y les niegan la atención médica; les están ajustando cuentas por su activismo contra la dictadura”, sentenció Hernández Vilar.
José Antonio Pompa López y Lázaro Mendoza García fueron detenidos y actualmente enfrentan cargos de “propaganda contra el orden constitucional”.
La Fiscalía Provincial de La Habana decretó prisión provisional para ambos tras meses de detención en la sede de la Seguridad del Estado, conocida como Villa Marista.
Los opositores están siendo investigados debido a un video no publicado que supuestamente los muestra realizando proclamas contra el régimen cubano.
Hasta la fecha, no se ha proporcionado documentación oficial a los acusados sobre su situación legal.
Pompa López, miembro del partido Cuba Independiente y Democrática, fue arrestado el 26 de abril cerca de su domicilio, situado en La Habana Vieja. Ese mismo día su casa fue registrada por la policía política, que confiscó diversos dispositivos electrónicos.
Por su parte, Lázaro Mendoza García fue arrestado el 14 de junio tras acudir a una citación en Villa Marista.
