AREQUIPA, Perú – El preso político cubano Eider Frómeta Allen, recluido en la cárcel de Boniato, Santiago de Cuba, permanece en un delicado estado de salud y sin recibir atención médica. Así lo denunció su madre, Gricelia Allen Sterlin.
Un hilo en X (antes Twitter) de la organización Cubalex señala que Frómeta Allen le informó a su madre mediante llamada telefónica que tiene fiebre, diarrea y se encuentra extremadamente débil, hasta el punto de casi no poder caminar. Además, mencionó que está defecando sangre y no ha sido atendido.
“Le han negado los medicamentos para tratar sus enfermedades crónicas, como el asma, la hipertensión arterial y una úlcera”, indica la publicación.
Asimismo, Frómeta Allen comentó que los reclusos están desnutridos pues la alimentación ha sido reducida a la mitad. Solo les dan arroz con harina, sin ninguna proteína.
Como resultado de esta situación, el joven preso político ha perdido alrededor de 15 kg. Debido a su condición, además, no pudo acercarse al teléfono por sí mismo, otro recluso tuvo que ayudarlo a llegar.
“La negación de atención médica y el control de medicamentos esenciales son contrarios a los principios de la Observación General Nº 21 sobre el Trato Humano de las Personas Privadas de Libertad del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos”, advierte Cubalex.
Con el cierre de datos a fecha 29 de febrero de 2024, el informe mensual de Prisoners Defenders (PD) contabiliza que un total de 1.067 prisioneros políticos y de conciencia en Cuba sufren condenas judiciales o disposiciones de limitación de libertad sin supervisión judicial alguna, debido proceso o defensa efectiva.
Esta cifra, que incluye tanto a convictos como a condenados de conciencia y otros presos políticos, es una flagrante violación de la ley internacional y un testimonio sombrío de la situación de los derechos humanos en la Isla, denuncia PD en su más reciente informe.
Durante los últimos 12 meses, se han confirmado y añadido a la lista 168 nuevos prisioneros políticos, lo que significa un promedio de 14 nuevos presos políticos cada mes. En febrero de 2024 se sumaron nueve nuevos prisioneros políticos a la lista, mientras que ocho fueron liberados tras el cumplimiento íntegro de sus sanciones o medidas impuestas.