Más de una veintena de migrantes cubanos fueron detenidos junto a otros migrantes por agentes federales de Migración y elementos de Grupos Beta del Instituto Nacional de Migración (INM), el pasado 6 de diciembre en elmunicipio de Tonalá, Chiapas.
Los migrantes se encontraban en una casa de seguridad y no pudieron demostrar su estancia regular en México ante las autoridades.
El INM informó que los migrantes llevaban brazaletes plásticos de colores y “se encontraban sobre cobijas, hules y cartones, junto a mochilas y bolsas con ropa y víveres”.
#Comunicado 📄 Ayer, @INAMI_mx coadyuvó con autoridades federales en el rescate y auxilio de 155 personas migrantes extranjeras, que portaban brazaletes plásticos de colores; se encontraban en una casa de seguridad en bahía de Paredón, Tonalá, #Chiapas. https://t.co/nQHwplqxzQ pic.twitter.com/yoDs2ZrF3N
— INM (@INAMI_mx) December 7, 2023
El grupo de 155 personas estaba integrado por 116 adultos, 26 cubanos, 28 de República Dominicana, 21 de China, 16 de Ecuador, 8 de Senegal, 6 de Guinea, 5 de Honduras, 3 de Nicaragua, 2 de El Salvador y uno de Costa Rica.
A pesar de estas detenciones, esta semana fue noticia que México suspenderá, hasta nuevo aviso, las repatriaciones por falta de dinero.
Entre las actividades suspendidas están los vuelos de repatriación de migrantes a sus países y el transporte terrestre para su traslado dentro de México. También se ordenó la suspensión de pagos a funcionarios y de las evaluaciones de control de confianza.
Los vuelos de deportación desde México hacia Cuba se habían reanudado en octubre luego de meses detenidos, con esta información se verán afectados.
La primera operación de este tipo tuvo lugar el 14 de octubre pasado, cuando un avión de la aerolínea Viva Aerobus llegó al aeropuerto internacional José Martí con 138 migrantes a bordo, 95 hombres y 43 mujeres.
A mediados de noviembre llegaron 43 migrantes en otro vuelo procedente de ese país
