MIAMI, Estados Unidos. – Madonna, la aún indiscutible Reina del Pop, inició su esperado Celebration Tour, la mayor gira de conciertos de sus 40 años de vida artística, el pasado 14 de octubre. Como se esperaba, la diva ha colmado titulares por sus presentaciones provocadoras y también por rendir homenaje a figuras del arte, el activismo e incluso la política.
A tres meses de haber sufrido un grave problema de salud que la obligó a ser hospitalizada, Madonna inició la serie de conciertos en el estadio O2 de Londres. La estrella aprovechó el momento en que cantaba Don’t Cry for me Argentina y La isla bonita para presentar imágenes de íconos de las artes y la política a los que, presuntamente, admira. Entre ellos se coló la imagen de Ernesto “Che” Guevara, el guerrillero cubano-argentino, asumido como símbolo por la izquierda mundial pero señalado por historiadores, periodistas y biógrafos “asesino de sangre fría” y homófobo.
@lanacioncom MADONNA HOMENAJEÓ A EVITA Y EL “CHE” GUEVARA A tres meses de haber sufrido un grave problema de salud, la “Reina del Pop” volvió a los escenarios con su Celebration Tour, que arrancó el sábado 14 de octubre con una presentación en el estadio O2 de Londres. Durante el recital, Madonna cantó “Don’t Cry for me Argentina”, del musical Evita, cuya versión cinematográfica ella protagonizó. Durante su interpretación, aparecieron en las pantallas imágenes de Eva Perón, el “Che” Guevara y Frida Kahlo, entre otras figuras.
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A la par del Che Guevara, también aparecieron fotos de figuras de la talla de Frida Kahlo, Malcolm X, James Baldwin, Martin Luther King Jr., Marlon Brando, Simone de Beauvoir y Sinéad O’Connor, entre muchos otros.
Más recientemente, el pasado 1 de noviembre, Madonna desembarcó con Celebration Tour en el Palau Sant Jordi de Barcelona. Aquí también rindió el mismo homenaje al Che Guevara y a otro cubano que fue perseguido por la dictadura que ayudó a fundar el guerrillero argentino: el escritor Reinaldo Arenas.
Quizás por ignorancia, la Reina del Pop, ícono LGBTIQ para todo el mundo, rindió homenaje a un guerrillero y político homófobo, a la vez que a una víctima de la represión y la homofobia.
Pero ninguna de estas ha sido la primera vez que Madonna expresa su admiración por el Che Guevara.
En 2003, la Reina del Pop se inspiró en la mítica foto del Che tomada por el cubano Alberto Korda ―la misma que ahora ha aparecido en Celebration Tour― para diseñar la portada de su entonces más reciente álbum, American Life, donde la cantante aparece usando una boina.
El gesto generó no solo la crítica de quienes han llamado al Che “el asesino de La Cabaña”, sino también de la izquierda mundial, que acusó a Madonna de apropiarse para fines comerciales de la efigie del “revolucionario antiimperialista”.
Incluso, durante la promoción de American Life, Madonna cambió su imagen para parecerse a un soldado, inspirada también en las fotografías del guerrillero cubano-argentino. Asimismo, protagonizó una sesión fotográfica con temática militar, donde posa con ropa color negro y verde oscuro, botas de combate y armas.
En una entrevista con la revista brasileña Veja, Madonna llegó a describir al Che Guevara como “un ícono instantáneamente identificado como un espíritu revolucionario”.
Por lo visto, la gran diva del pop solo ha llegado a conocer la versión de la historia difundida por la izquierda mundial: la del mítico guerrillero, revolucionario, internacionalista y antiimperialista. Madonna no ha visto, o no ha querido ver, al líder machista, autoritario y homófobo, ni al promotor de un “hombre nuevo”, concepto por el que miles de cubanos fueron llevados a campos de trabajo forzado. Tampoco ha conocido al guerrillero marxista-leninista, dogmático y moralista, muy alejado del espíritu de libertad que ella misma ha asumido como bandera.
