Ciudad de México.- El Gran Maestro cubano, nacionalizado por Estados Unidos, Leinier Domínguez, terminó en la segunda posición de la Copa Sinquefield de ajedrez.
Con este resultado logró sumar 11.2 puntos Elo, lo que le permitió escalar al séptimo lugar del ránking mundial.
En la última jornada el Gran Maestro de origen cubano empató en la última ronda ante Levon Aronian en 33 movimientos de una Apertura Española, pero necesitaba una victoria para subirse a lo más alto del podio.
Leinier finalizó invicto en ocho partidas con un total de 5.0 unidades: par de triunfos y seis tablas.
Con este resultado el cubano se llevó a casa un premio de 65 mil dólares. Mientras que el vencedor del certamen, Fabiano Caruana, se llevó100 mil dólares como recompensa.
Leinier: orgullo cubano
Nacido en La Habana el 23 de septiembre de 1983, en el año 2014 logró ubicarse en el puesto diez de este ranking con una puntuación Elo de 2768.
Representó a Cuba en nueve Olimpíadas de ajedrez y ganó cinco veces el campeonato nacional.
Sobresalen entre sus presentaciones la del Torneo Internacional Capablanca in Memoriam de 2004, con una puntuación Elo de 2808; y el magistral Ciudad de Barcelona en 2006, donde terminó campeón venciendo incluso a ajedrecistas como el Gran Maestro ucraniano Vasili Ivanchuk.
En el 2007 integró el equipo que asistió al Gran Maestro húngaro Peter Leko en su entrenamiento para el campeonato mundial. En el 2013 ganó el Grand Prix de la Federación Internacional de Ajedrez ( FIDE) y en la Olimpiada de Ajedrez de 2016, se coronó subcampeón.
En 2017 Leinier Domínguez decidió emigrar a los Estados Unidos, y al año siguiente fue inscrito como jugador de la Federación de Ajedrez de EE. UU.
En 2020, el telecentro de la provincia de Mayabeque (Telemayabeque) arremetió contra los ajedrecistas cubanos radicados en EE.UU. . Señalaron a Leinier Domínguez, Lázaro Bruzón y Yuniesky Quezada, quienes se reunieron para celebrar el Día de los Padres.
El medio provincial aprovechó una publicación compartida en redes sociales para atacar a los ajedrecistas, que representaron a Cuba en disímiles eventos internacionales durante más de una década y los calificó de “esclavos”.
Los logros de Leinier son omitidos por los medios oficiales, los mismos que antes lo llenaban de elogios