MIAMI, Estados Unidos. – El ministro de Energía y Minas de Cuba, Vicente de la O Levy, calificó este domingo de “incidentes mínimos” las manifestaciones ocurridas en el país tras el apagón masivo que comenzó el pasado viernes.
Además, durante una conferencia de prensa con medios internacionales, De la O Levy describió las protestas como “indecentes” y se refirió a los participantes como “el cobarde que no razona y el que se vende”.
Según trascendió en videos de redes sociales, múltiples cacerolazos y protestas pacíficas estuvieron ocurriendo durante la noche del 19 de octubre. Las manifestaciones se concentraron principalmente en las provincias de La Habana y Santiago de Cuba.
Un video compartido en Facebook por el activista Juan Moreno, director del medio comunitario Amanecer Habanero, del Instituto Cubano por la Libertad de Expresión y de Prensa (ICLEP), muestra decenas de cubanos que pararon el tráfico en San Francisco de Paula, calle capitalina hicieron sonar cazuelas.
Otro material publicado por el periodista independiente Daniel Benítez da cuenta de otra protesta en la que los cubanos hicieron sonar cazuelas durante la noche de este sábado en Lawton.
Asimismo, muy cerca de esa localidad, en Santo Suarez, los habaneros también hicieron ruidos con ollas y calderos, como se puede escuchar en un video compartido por CubaNet en X (antes Twitter).
En consecuencia, de acuerdo con la agencia de noticias EFE, se ha notado un incremento en la presencia policial en La Habana, con agentes ubicados en los principales cruces de la ciudad y patrullas recorriendo las calles.
Cuba enfrenta desde hace años una crisis energética que se ha intensificado en semanas recientes debido a la escasez de combustible —resultado de la falta de divisas para importarlo— y a las averías en las obsoletas centrales termoeléctricas de origen soviético.
Antes del viernes de la semana pasada, la tasa máxima de afectación superó el 50% de la demanda eléctrica, lo que significa que la mitad del país estuvo simultáneamente sin suministro debido a la insuficiente capacidad de producción de energía en la Isla.
Luego, el viernes se produjo la “desconexión total” del Sistema Electroenergético Nacional (SEN) tras la salida de la Central Termoeléctrica Antonio Guiteras, lo que dejó a todo el país a oscuras por 72 horas.
Los largos apagones no solo deterioran el rendimiento económico de Cuba, que lleva años sumida en una grave crisis, sino que también han sido el detonante de protestas antigubernamentales. Las más notables ocurrieron el 11 de julio de 2021, las mayores en décadas, y las más recientes (antes de este fin de semana) tuvieron lugar el 17 de marzo en Santiago de Cuba y otras localidades.
