En un alarmante suceso que pone de manifiesto las críticas condiciones del sistema de salud cubano, una joven madre de 20 años se vio obligada a dar a luz en su propio hogar después de que los médicos del hospital provincial de Holguín se negaran a hospitalizarla, alegando la inexistencia de camas disponibles en el centro médico.
El angustioso episodio se desencadenó cuando la joven llegó al hospital con fuertes dolores y contracciones, buscando asistencia médica para el parto. Sin embargo, la negativa de los profesionales de la salud a admitirla en el hospital la forzó a enfrentar una situación de alto riesgo en su propia vivienda.
La denuncia de esta situación llegó a la luz pública a través de una publicación en Facebook de la hermana de la parturienta, Yudislaine Naranjo, quien compartió la impactante historia. Según el relato de Naranjo, los médicos informaron a la joven madre que debía regresar a su hogar y volver al hospital solo cuando la cabeza del bebé estuviera visible, momento en el cual la llevarían directamente a la sala de parto. Este consejo médico resultó en una situación desesperada y peligrosa para la madre y el bebé.
Finalmente, en las primeras horas del 13 de octubre, la joven madre dio a luz en su casa, en circunstancias que distan de ser las adecuadas para el bienestar y seguridad de la parturienta y su hijo. A pesar de las adversas condiciones, ambos sobrevivieron al traumático episodio.
El recién nacido, un niño al que llamaron Cristopher, fue trasladado a una unidad de cuidados neonatales, donde recibe atención médica especializada. Sin embargo, la madre enfrenta una recuperación postparto sin el apoyo y la infraestructura médica que debería proporcionar el sistema de salud cubano.
Este incidente arroja luz sobre la crítica situación que atraviesa el sistema de salud en Cuba, un sistema que, según numerosos informes y testimonios, sufre una grave falta de recursos, personal médico y condiciones adecuadas para la atención de los pacientes. La situación se agrava por la situación política y económica en la isla, lo que ha llevado a una crisis generalizada en el sector de la salud.
La denuncia de Yudislaine Naranjo en las redes sociales ha generado una ola de indignación y preocupación entre los ciudadanos, quienes exigen que se atiendan con urgencia las deficiencias del sistema de salud cubano y se garantice el bienestar de la población, especialmente de las mujeres embarazadas y los recién nacidos.
