MIAMI, Estados Unidos. – Catorce artistas cubanos unieron sus talentos y experiencias en “Halando Parejo”, una exposición que resalta las intrincadas vivencias y narrativas culturales de los inmigrantes cubanos a través del arte. La muestra, comisariada por Mónica Batard, se presentó en el Museo Kendall de Arte Contemporáneo de las Américas (MoCAA), en Miami, desde el 22 de septiembre al 6 de octubre.
“Las experiencias migratorias y el tejido cultural resultante son el alma y el telón de fondo de ‘Halando Parejo’”, explica Jorge Rodríguez Diez (R10), director ejecutivo del MoCAA, al enfatizar que la exposición no es solo una exhibición de arte, sino también una narrativa de naturaleza catártica. “Una vez que se deja la isla y cambian las circunstancias, varían los intereses de los artistas, tanto como la audiencia de su trabajo”, añade Rodríguez Diez.
Las obras presentadas en “Halando Parejo” fueron tan diversas y únicas como los mismos artistas participantes, precisa el medio cubano Rialta Magazine. La muestra va desde las figuras femeninas de Osy Milian, inspiradas y ambientadas en la cultura pop, hasta el cinismo formal y los dibujos de Maikel Linares realizados “al margen de cualquier estilo o movimiento”. Por su parte, Evelyn Sosa ofrece íntimos retratos de sus amigas, mientras que Lázaro Niebla pone al descubierto rostros esculpidos en madera, reflejando historias de dificultades diarias.
La muestra va más allá, proporcionando una visión más profunda de las experiencias de emigración mediante la exposición de cómo “los temas se transforman y otra realidad motiva y se revela en las obras”. Los trabajos de los artistas Ivonne Ferrer, Niels Reyes, Yanelis Mora, y muchos más, constituyen un mosaico de técnicas, estilos y expresiones que revelan la rica diversidad y profundidad de la comunidad artística cubana en el extranjero.
Mónica Batard no solo actúa como comisaria sino que también comparte su propia vulnerabilidad a través de su arte, indicando que sus obras intentan “calmar su desesperación”, nacida de la “espera angustiosa para reencontrarse con su pequeño hijo”.
De acuerdo con Rialta Magazine, cada pieza se convierte en un hilo en el complejo tejido de historias y perspectivas que revela cómo, a pesar de los desafíos, estos artistas han encontrado formas de enriquecer sus nuevas comunidades con su creatividad y habilidades. “Halando Parejo” destaca por ofrecer una oportunidad excepcional para “comparar, e intentar conciliar, el quehacer emprendido [por estos artistas] en contextos distintos, incluso antagónicos”, afirma Rodríguez Diez.
Al explorar las obras expuestas, los visitantes se encontrarán inmersos en un viaje que no solo explora el arte y la cultura, sino también los temas de la emigración, la identidad, y la tenacidad del espíritu humano. Es este un recorrido que, sin duda, dejará a los espectadores reflexionando sobre las innumerables maneras en que la emigración afecta y forma el quehacer creativo de los artistas y, por ende, nuestra percepción colectiva del arte y la cultura en la diáspora.