SLP, México.- Las dos unidades de la Central Termoeléctrica (CTE) Carlos Manuel de Céspedes, de Cienfuegos, que salieron del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) el pasado diciembre por un “mantenimiento intensivo”, tardarán al menos tres meses en generar nuevamente electricidad.
Se trata de un “golpe severo al SEN”, de acuerdo con la prensa oficialista del régimen, pues las unidades tres y cuatro generan en total 316 megavatios.
José Osvaldo González Rodríguez, director general de la CTE, explicó a Granma que se han “intervenido” varios elementos de la turbina. “Ese es un trabajo muy complejo y lleva tiempo. Estimamos que debe concluir a finales del mes de enero, una parte; y a mediados de febrero, la otra”, dijo.
Posteriormente, comenzarán a armar la turbina, lo que calificó el directivo como “la ruta crítica para la Unidad No. 3” y el proceso se prevé que concluya la primera quincena de abril.
“El objetivo fundamental es que la Unidad 3, cuando sincronice, con sus 158 MW, que es su potencia nominal, pueda regular la frecuencia del SEN, y tenga la confiabilidad que siempre han tenido los bloques del Sistema”, aportó.
No obstante, la otra unidad en mantenimiento, la número cuatro, presenta afectaciones en la caldera y tardaría más tiempo en reconectar al SEN.
Al salir del sistema, tenía desalineados el sobrecalentador y recalentador, que había originado fallas en las tuberías. “La magnitud del trabajo es enorme”.
En la unidad cuatro planean sustituir los intercambiadores asociados a esa avería, que podría propiciar “contar con una caldera en muchas mejores condiciones”.
Después de alistar las tuberías, se dará mantenimiento a los equipos auxiliares: los transformadores del bloque, el generador y la turbina, y la unidad, finalmente, se reincorporaría al SEN en la primera quincena del mes de junio.
Las dos unidades de la CTE de Cienfuegos no salían del sistema desde la caída general del SEN el 20 de octubre.
Al informar de la desconexión de las unidades en diciembre, los directivos de la termoeléctrica adelantaron que aspiraban a concluir primero la reparación de la Unidad 3, que pasaría por un proceso de limpieza de conductos y eliminación de sedimentos y mejillones que afectaban el flujo de agua de mar para el enfriamiento.
En la Unidad 4, por otra parte, habría una reparación más profunda, anunciaron entonces. El mantenimiento se efectuaría en el economizador, los intercambiadores y la turbina.
Con esos bloques sin aportar electricidad, más las unidades 2 y 3 de la CTE Santa Cruz fuera del SEN, al igual que la 5 de la CTE Renté y con una limitación en generación térmica de 214 MW, la realidad electroenergética de Cuba es crítica.
Para este viernes, la Unión Eléctrica pronostica una disponibilidad de 2.165 MW frente a una demanda máxima de 2.900 MW, lo que generará una afectación de 805 MW en el horario pico.
