César Alejandro tenía 19 años y estaba cumpliendo el Servicio Militar Obligatorio. El pasado fin de semana salió de pase y lo asesinaron durante unas festividades locales en la ciudad de Trinidad, en la provincia de Sancti Spíritus.
Su tío, Daismany Palacio, confirmó a Martí Noticias que su sobrino falleció en el hospital en la madrugada del sábado. “No pudieron salvarlo. Mi familia está destrozada y no vamos a parar hasta que se haga justicia”.
Según explicó, el adolescente tuvo una discusión con unas cinco personas durante la Fiesta de la Canchánchara. Varios testigos del hecho le contaron que él no aceptó que uno de ellos le dijera que estaría con su hermana, menor de edad, aunque fuera por la fuerza.
“Ahí comenzó la pelea. Él estaba solo. Le dieron varias puñaladas y lo golpearon brutalmente cuando apenas podía moverse. Lo dejaron tirado y unos conocidos lo recogieron y lo llevaron al Hospital General de Trinidad, pero ya era demasiado tarde”, relató.
Palacio reside desde hace aproximadamente seis meses en Dallas, Estados Unidos. Cuando se fue de Cuba, César Alejandro vivía con él. “Era un muchacho muy bueno. No se metía con nadie, siempre riéndose con las personas en la calle, todo el mundo lo quería”.
“Apenas puedo hablar con mi familia porque cada vez que llamo lo único que hacemos es llorar. No podemos soportar esta pérdida. Era nuestro César… Fue un entierro tan grande, todo el pueblo de Trinidad estaba allí. Le agradezco mucho el apoyo que nos están dando en este momento”, dijo.
En sus redes sociales, Palacio ha estado informando sobre lo ocurrido y ha identificado a varios de los agresores. “Solo están presos los que le dieron las puñaladas, pero los que lo golpearon en el piso cuando todavía estaba vivo, siguen en la calle”, aseguró a Martí Noticias.
“La Policía le tomó declaraciones a la familia el mismo día que César Alejandro falleció. No sabemos más nada. Nadie nos ha informado del proceso, tampoco han ido a casa de su mamá, ni de su abuela, ni de mi hermano. Y yo no voy a dejar que las cosas se queden así”.
Palacio publicó este martes un video en su página de Facebook en el que le pedía al gobernante cubano Miguel Díaz-Canel que se interesara por el caso. “Esto tiene que llegar a ti. Demuéstrale al pueblo que en Cuba se hace justicia, yo quiero que veas las fotos de lo que le hicieron a mi sobrino”.
“En Trinidad hay cámaras, donde están esos videos, busquen cuando la gente corrió, cuando se fueron y lo dejaron tirado. Hasta cuándo es esto”, cuestionó.
Según le dijeron, en la fiesta había un solo policía. “Nadie pudo hacer nada porque, ¿quién que no sea de la familia se va a meter en una bronca con personas armadas?”.
“Ya yo sé muchas cosas que pasaron ese día. Me han contado que los que atacaron a mi sobrino tienen familiares en Estados Unidos que le van a pagar sus abogados. Y yo no me voy a conformar con que esas personas, a los cuatro o cinco años, estén otra vez en la calle, como si no hubiera pasado nada. No voy a descansar hasta que se haga justicia con mi César. No se imaginan el dolor tan grande que tiene la familia”, aseguró.
Hasta el momento de redactar esta nota, ni las autoridades cubanas ni la prensa estatal había informado sobre lo ocurrido. Martí Noticias intentó contactar con la estación de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) de Trinidad, pero nadie contestó el teléfono.
El pasado mes de noviembre, la revista Bohemia publicó un reportaje a partir de una encuesta realizada a casi un centenar de cubanos sobre el aumento de la violencia en el país en los últimos dos años. Según dijeron, el 92,4% de los encuestados percibe un incremento de los delitos violentos; el 42,4% aseguró tener conocimiento de diez o más sucesos de esa naturaleza en el último semestre; el 48,9% fue víctima de algún delito de este tipo o conoce a alguien que lo padeció, y el 66,7% lo denunció a la Policía y menos del 30 % de las víctimas encontró solución por parte de las autoridades.
“El incremento de la violencia, señalaron los especialistas, tiene lugar en medio de una de las más profundas crisis económicas y sociales que atraviesa el país. Por otra parte, la pérdida de valores y la crisis formativa, la vagancia y la deslegitimación del trabajo como fuente de ingresos, el machismo y la violencia representada en los medios, así como las características y experiencias personales, también configuran el entramado sociocultural que envuelve a la violencia social”, reconocieron.
Los resultados de la investigación contradicen el propio discurso del régimen de La Habana que, hasta hace muy poco, insistía en que la cobertura a estos hechos por parte de los medios independientes formaba parte de una campaña “orquestada por los enemigos de la revolución”.
El más reciente Informe de inseguridad pública en Cuba, realizado por el Observatorio Cubano de Auditoría Ciudadana (OCAC), revela una alarmante tendencia al aumento de los crímenes violentos en el país.
El análisis señala que durante el primer trimestre de 2023 se comprobaron 42 robos, 33 asesinatos, 17 asaltos y 6 delitos diversos. La tendencia al alza de este tipo de hechos continuó durante el segundo trimestre, registrándose 189 reportes de crímenes, principalmente en las provincias de La Habana, Villa Clara y Guantánamo.
