A pesar de las intervenciones de los funcionarios cubanos tratando de aplacar los temores entre la población a que tenga lugar otro colapso del sistema eléctrico nacional, residentes de varias provincias aseguraron que el gobierno no tiene capital político ni capacidad económica para solucionar la crisis.
Vicente de la O Levy, el ministro de Energía y Minas de Cuba, se refirió el jueves al colapso total de la red eléctrica de Cuba que tuvo lugar el 18 de octubre y se prolongó por varios días. “Hoy tenemos una situación tensa, compleja, pero diferente a la de aquel momento. Eso tiene al sistema en una situación de un déficit muy grande. Pero no es igual que como estaba en aquella situación del reciente blackout. Tenemos déficit de combustible, pero no estamos en cero combustible”, afirmó.
“Las condiciones no están para que el sistema electroenergético nacional se caiga, el sistema está débil, hay un déficit muy grande de generación, particularmente con el combustible, pero no estamos en cero”, acotó el funcionario.
Mientras transcurría su comparecencia en la Mesa Redonda, en Cienfuegos padecían un apagón de 22 horas, según declaró Juan Alberto de la Nuez Ramírez, desde Aguada de Pasajeros.
“Las plantas están totalmente obsoletas, es un sistema fracasado, improductivo”, declaró a Martí Noticias.
Desde el extremo occidental de la isla, el opositor José Rolando Casares, residente en Pinar del Río, consideró que lo único que están haciendo las autoridades es ganar tiempo.
“Esto está de mal en peor, y ellos están tratando de que entre la gente no cunda el pánico y realmente lo que están es ahogados”, dijo el activista.
La cúpula del régimen aborda la situación con un discurso triunfalista. El mes pasado el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel afirmó que Cuba “cuenta con infraestructuras industriales, productivas, hidráulicas y eléctricas en franco proceso de fortalecimiento”, durante su intervención en el Foro de Inversiones de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Sin embargo, en la provincia de Holguín, Dámaso Alberto Fernández, comentó que el oficialismo no tiene capacidad para salir de la crisis.
“Ellos no pueden sacar al país de la crisis, ayer aquí fue de 15 horas sin electricidad. No es un secreto para nadie que Cuba es un Estado fallido”, afirmó.
El viernes, en una reunión de trabajo, el primer ministro Manuel Marrero Cruz dijo que la vida política y social de la nación está recogida en las proyecciones de Gobierno y que el país continuará “el avance hacia un socialismo próspero y sostenible”.
En Baracoa, donde se trabaja con dificultad para reparar los cuantiosos daños que dejó el huracán Oscar, el comunicador independiente Emilio Almaguer advirtió que no hay tal planificación sino que en realidad están improvisando soluciones a partir de los recursos que adquieren a cuentagotas: “Ellos están tirando, a merced de lo que pueden y de lo que les está llegando a diario de combustible y de recursos. Esto ya es situación cero”.
Desde el oriente cubano, la activista miembro de la organización opositora Corriente Martiana, Teresa Miranda Céspedes, apuntó además a la falta de alimentos, supuestamente garantizados por la cartilla de racionamiento: “Nada más que tienes que ver que no han traído este mes nada para la canasta esa que ellos le dicen básica”.
“Ayer fue horrible los apagones; anoche igual. Ellos no quieren reconocer su fracaso, ellos no tienen cómo levantarse”, sentenció la señora.
El periodista independiente Guillermo del Sol, residente en Santa Clara, calificó la crisis actual de muy profunda.
“Ni tienen petróleo, ni tienen plantas, ni tienen dinero. Con el desabastecimiento que tenemos, de verdad que nosotros no tenemos cómo salir de este túnel oscuro”, opinó el comunicador.
Desde La Habana, la economista Marta Beatriz Roque Cabello, coincidió en que el gobierno no tiene respuestas para salir de esta precaria situación.
“No es una crisis solamente de electricidad, hay crisis con el agua, hay crisis con el gas de ‘balita’, con las medicinas, crisis con los médicos, en las escuelas, hay crisis también con las libretas, con los maestros… Es que hemos caído en un bache que no tiene solución. De ese bache no se sale”, concluyó Roque Cabello.
A raíz del apagón masivo ocurrido el mes pasado se hicieron públicos múltiples llamados a la renuncia de los gobernantes cubanos, uno de ellos, el del Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH), responsabilizó al gobierno cubano por la emergencia humanitaria que vive Cuba.
Para esta organización radicada en Madrid, “La declaración del estado de ‘emergencia electroenergética’ es la admisión tácita de un fracaso en la gestión del país, que empeora cada día a marcha forzada”.
“La crisis va mucho más allá de un déficit de electricidad —que mantiene a los cubanos con apagones de casi 20 horas al día—, sino que abarca la falta de alimentos, agua, medicamentos y el aumento de la inseguridad ciudadana”, afirmó el OCDH.
[Con reporte de Tomás Cardoso para Martí Noticias]
