El gobierno de Estados Unidos mantuvo a Cuba, Corea del Norte, Irán y Siria en la Lista de Estados Patrocinadores del Terrorismo 2022, documento publicado el 30 de noviembre por el Departamento de Estado.
Para designar a un país como Estado Patrocinador del Terrorismo, el Secretario de Estado debe determinar que el gobierno de dicho país ha brindado apoyo repetidamente a actos de terrorismo internacional.
Una vez que un país es designado, sigue siendo un Estado patrocinador del terrorismo hasta que se rescinda la designación de conformidad con los criterios legales que exigen que el Presidente certifique que: a) un país designado no ha prestado ningún apoyo a actos de terrorismo internacional durante los seis meses anteriores y ha dado garantías de que no apoyará actos de terrorismo internacional en el futuro, o 2) se ha producido un cambio fundamental en el liderazgo y las políticas del país designado, el país no apoya actos de terrorismo internacional y ha dado garantías de que no apoyará actos de terrorismo internacional en el futuro.
El 12 de enero de 2021, el Departamento de Estado designó a Cuba como Estado Patrocinador del Terrorismo tras determinar “que brindó apoyo reiteradamente a actos de terrorismo internacional al otorgar refugio seguro a terroristas”.
Cuba fue designada previamente como Estado Patrocinador del Terrorismo en 1982 debido “a su larga historia de brindar asesoramiento, refugio seguro, comunicaciones, entrenamiento y apoyo financiero a grupos guerrilleros y terroristas individuales”.
La designación fue rescindida en 2015 después de que una revisión exhaustiva determinara que el país cumplía con los criterios legales para la rescisión.
En 2021, el Secretario de Estado determinó que Cuba “había brindado apoyo reiteradamente a actos de terrorismo internacional en los seis años transcurridos desde que se rescindió su designación”. Citando protocolos de negociación de paz, Cuba rechazó la solicitud de Colombia de extraditar a 10 líderes de la guerrilla comunista del ELN que viven en La Habana después de que ese grupo se atribuyera la responsabilidad del atentado con bomba de 2019 contra una academia de policía de Bogotá que mató a 22 personas e hirió a otras 87.
Además, el informa destaca que “el gobierno cubano no respondió formalmente” a las solicitudes de extradición de los líderes del ELN Víctor Orlando Cubides (alias “Pablo Tejada”) y Ramírez Pineda (alias “Pablo Beltrán”) presentadas por Colombia.
En noviembre, en cumplimiento de una orden del presidente colombiano Gustavo Petro, el Fiscal General anunció que se suspenderían las órdenes de captura contra 17 comandantes del ELN, incluidos aquellos cuya extradición Colombia había solicitado previamente.
El informe dice que Cuba también sigue albergando a varios fugitivos estadounidenses buscados por cargos relacionados con la violencia política, muchos de los cuales han residido en Cuba durante décadas.
El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel ha pedido a EEUU que saque a su país de la lista negra del terrorismo, cuya inclusión tiene serias implicaciones económicas.
En noviembre, el presidente de Chile, Gabriel Boric, pidió al presidente Joe Biden un cambio de medida. “Es imperativo levantar las sanciones a Cuba y eliminar a Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo”, aseguró tras reunirse con Biden en la Casa Blanca. De forma similar se ha expresado Andrés Manuel López Obrador, presidente de México.
En octubre pasado, Estados Unidos indicó que Cuba tendrá que mejorar la situación de los derechos humanos si desea avanzar en las relaciones bilaterales.
Asimismo, en respuesta a una declaración del gobierno cubano sobre el tema del terrorismo, un portavoz del Departamento de Estado comentó que la ley estadounidense establece criterios legales específicos para rescindir una designación de “país que patrocina el terrorismo”, y que cualquier revisión del estatus de Cuba se basaría en la ley y los criterios establecidos por el Congreso.
A pesar de la posición de la administración Biden, algunos políticos de EEUU apoyan remover a Cuba de la lista.
Por ejemplo, el congresista demócrata Jim McGovern ha dicho que una medida que Estados Unidos puede adoptar para proporcionar alivio a Cuba “es eliminarla de la lista del terrorismo” porque “no hay absolutamente ninguna razón para que Cuba esté en esa lista. Ninguna”.
COREA DEL NORTE
El 20 de noviembre de 2017, el Secretario de Estado designó a la República Popular Democrática de Corea como Estado Patrocinador del Terrorismo. El Secretario determinó que el gobierno brindó apoyo repetidamente a actos de terrorismo internacional, ya que estaba implicada en asesinatos en suelo extranjero.
IRÁN
Designado como Estado Patrocinador del Terrorismo en 1984, Irán continuó su apoyo a la actividad terrorista en 2022, incluido el apoyo a Hezbolá, a los grupos terroristas palestinos designados por Estados Unidos en Cisjordania y Gaza, y a varios grupos terroristas y militantes en Bahréin, Irak, Siria y en todo Oriente Medio.
Irán utilizó el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica-Fuerza Quds para brindar apoyo a organizaciones terroristas, proporcionar cobertura para operaciones encubiertas asociadas y crear inestabilidad en la región.
Irán ha reconocido la participación de la Guardia Revolucionaria Islámica en los conflictos de Irak y Siria. Dicha unidad “es el principal mecanismo de Irán para cultivar y apoyar la actividad terrorista en el extranjero”.
SIRIA
Designado en 1979 como Estado patrocinador del terrorismo, Siria continuó su apoyo político y militar a varios grupos terroristas, denunció el informe del Departamento de Estado.
El régimen siguió “suministrando armas y apoyo político a Hezbolá y siguió permitiendo que Irán se rearmara y financiara a la organización terrorista”.
La relación del régimen de Bashar al-Assad con Hezbolá e Irán siguió siendo sólida en 2022, “ya que el régimen siguió dependiendo en gran medida de actores externos para luchar contra los opositores y asegurar las zonas”.
El Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, designado por Estados Unidos, “sigue presente y activo en el país con el permiso de Assad. Assad siguió siendo un firme defensor de las políticas de Irán, mientras que Irán mostró un apoyo igualmente enérgico al régimen sirio. Los discursos y comunicados de prensa del régimen sirio a menudo incluían declaraciones de apoyo a grupos terroristas, en particular a Hezbolá, y viceversa”.