La Policía cubana capturó este martes al presunto asesino de Dayami Hechevarría Rodríguez, de 39 años y residente en Puerto Padre, Las Tunas, cuyo cadáver fue hallado en Manatí tras varios días desaparecida. El hombre fue identificado como Norges Rodríguez, ex pareja de la víctima, de quien ya se sospechaba, y la causa de la muerte, según informaron las autoridades a la familia, fue la asfixia.
“La única información que tenemos es que fue detenido en La Habana, según la Policía, pero no nos han informado si ya lo trasladaron a Las Tunas, donde ocurrió el hecho”, cuenta a 14ymedio Walter Carballosa, que también fue pareja de la víctima. Hechevarría y Rodríguez llevaban cuatro meses divorciados.
“Él tiene un historial. Ha amenazado a todas las mujeres que ha tenido y le gusta maltratarlas. A una de ellas la cortaba”, detalla.
Según Carballosa, el entierro de la víctima no pudo realizarse en Puerto Padre sino en Manatí, pues los forenses “no permitieron trasladar el cuerpo”. “Llevaba muchos días tirada en un hueco, y el cadáver ya estaba descompuesto”, argumenta.
“Sus sueños eran ver crecer a sus hijas, que ahora están con su abuela. Están bastante devastadas”
“Era una mujer alegre, carismática. Llevaba la alegría en la sangre”, prosigue Carballosa sobre la víctima, que trabajaba como dependienta en un quiosco. “Sus sueños eran ver crecer a sus hijas, que ahora están con su abuela. Están bastante devastadas”, lamenta. Una de las muchachas tiene 15 años; la otra, 19.
Carballosa, que estuvo casado con Hechevarría hace años, asegura mantener un gran cariño por sus hijas. “Siempre mantuvimos la relación y aún después que nos dejamos yo seguí ocupándome de las niñas y soy como un padre para ellas”.
La tunera es la víctima número 56 de violencia machista en Cuba, según los datos de los observatorios feministas independientes cotejados por 14ymedio. Esos listados podrían revisarse al alza, ya que las organizaciones advirtieron a inicios del verano que tomarían un descanso estival, por lo que apenas hay recuento de las últimas semanas.
Según un testimonio familiar ofrecido al diario ADN, Hechevarría salió de la casa en que vivía con sus hijas “en chancletas” y con su celular en la mano el domingo 21 de agosto. Un día después, sus hijas recibieron un mensaje de texto en el que Dayami les decía que se había ido a la playa con unos amigos y les pedía que no se preocuparan.
La mujer también felicitó a través de Facebook a su hija, que cumplía 15 años. Sin embargo, no se volvió a saber de ella y su teléfono estaba desconectado. “Su hija mayor fue a la policía a denunciar la desaparición y ahí investigaron que la última ubicación de su teléfono no fue en la playa, como decía el SMS, sino Majibacoa, otro municipio de Las Tunas.
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