En una impactante mañana del sábado, los residentes de la Calle Cuba #103, entre Tejadillo y Chacón, en el municipio La Habana Vieja, fueron testigos de un aterrador derrumbe que sacudió a la comunidad y sus cimientos. Afortunadamente, según las autoridades locales, no se reportaron víctimas fatales ni heridos, pero más de 60 familias se encuentran sin un lugar al que llamar hogar.
El Consejo de Administración Municipal de La Habana Vieja recurrió a las redes sociales para informar al público sobre el incidente y las medidas tomadas en respuesta. El comunicado oficial detalla que, tras recibir la noticia del derrumbe, los bomberos y el personal de salud se movilizaron inmediatamente. Además, las máximas autoridades gubernamentales del territorio y la provincia se presentaron en el lugar, brindando apoyo a las personas afectadas y participando en las labores de rescate.
Hace menos de 48 horas una familia cubana me envió un video de las condiciones en la que estaba su edificio en Cuba #103 % Chacon y Tejadillo. Hoy en la madrugada el edificio colapsó. Los vecinos me comentan que hay varios heridos pero gracias a Dios no hubo que lamentar pérdidas… pic.twitter.com/l5HR0JUHdo
— Mario J. Pentón (@MarioJPenton) November 4, 2023
Una de las damnificadas, Milenny Milagros M Rodríguez, hizo oír su voz en las redes sociales, culpando a las instituciones del Estado por poner en riesgo las vidas de los residentes. En sus publicaciones, Milenny expuso la negligencia y el abandono que, según ella, han caracterizado la relación de las instituciones con la problemática de vivienda en el área.
Según su testimonio, la situación se venía deteriorando durante años, con el edificio construido en la época colonial experimentando un constante declive. Las recientes lluvias aceleraron su estado de deterioro, lo que llevó al colapso del edificio y afectó gravemente a las viviendas adyacentes. A pesar de la urgencia, los funcionarios del gobierno y la dirección municipal de la vivienda aparentemente respondieron con la misma respuesta rutinaria: “No hay recursos”. Esto ha dejado a la comunidad en una situación desesperada.
Milenny Milagros M Rodríguez también alertó sobre una viga de madera enorme que amenaza con caer sobre la escalera utilizada por los residentes del segundo piso y la azotea. Según los funcionarios, la eliminación de esta viga tampoco cuenta con los recursos necesarios.
El derrumbe en la Calle Cuba #103 refleja una tendencia preocupante en La Habana Vieja. En octubre del año pasado, se produjo un incidente similar que afectó la zona histórica de la ciudad, a pesar de que esta área fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y experimentó un proceso de gentrificación en la última década, con inversionistas comprando casonas y convirtiéndolas en hostales.
El profesor Abel Tablada, de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Tecnológica de La Habana, describió la situación como crítica y destacó que los recursos destinados a la inversión en hoteles se están desperdiciando en un momento en que el turismo está en declive. Su llamado de atención es claro: se necesitan urgentemente fondos para reparar o demoler edificaciones en condiciones críticas y para apoyar un programa de emergencia de viviendas dignas.
Hace exactamente una década, expertos del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo advirtieron sobre el déficit habitacional en La Habana Vieja, señalando el deterioro acumulado en numerosas edificaciones, la influencia de la autoconstrucción informal en las antiguas estructuras, la inmigración desde otras provincias y la falta de inversión en la rehabilitación como las principales causas del problema.
En medio de este panorama sombrío, el llamado a la acción es claro. Las autoridades deben tomar medidas urgentes para abordar la crisis de vivienda en La Habana Vieja, priorizando la seguridad de los ciudadanos y la preservación de su valioso patrimonio histórico.
