MIAMI, Estados Unidos. – Las compañías Delta Air Lines y United Airlines solicitaron al Departamento de Transporte (DOT, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos una exención de inactividad en varias rutas debido a la baja demanda de viajes entre Estados Unidos y Cuba.
Un reporte del sitio Aviación Online indica que “debido a las limitaciones de frecuencias del mercado cubano de cielos cerrados, actualmente hay más vuelos y asientos de lo que la demanda justifica”.
De acuerdo con la nota, Delta Air Lines pidió al DOT una exención de temporada desde el 29 de octubre de 2023 hasta el 30 de marzo de 2024 para sus siete frecuencias Atlanta-La Habana y siete de sus 14 frecuencias entre Miami-La Habana.
Aunque la cantidad de pasajeros que vuelan entre EE.UU. y Cuba ha decaído, la aerolínea espera que los números se recuperen, caso en el cual retomaría sus servicios.
Anteriormente, Delta pidió una exención de inactividad durante la temporada de verano de 2023 para sus servicios en la ruta entre Atlanta y La Habana, que fue aceptada.
Por su parte, el pasado 8 de junio la compañía United Airlines notificó al DOT la suspensión de sus servicios entre Newark (estado de Nueva Jersey) y la capital cubana a partir del próximo 29 de octubre. De esta manera Cuba pierde toda conexión sin escalas con la ciudad de Nueva York, en las cercanías de Newark.
“La aerolínea también explicó que no desea exención de inactividad para estas frecuencias y centrará todas sus operaciones a La Habana desde su hub en el aeropuerto de Houston-Intercontinental”, señala la nota.
En la actualidad, United Airlines es la única empresa aérea estadounidense que no ofrece vuelos entre Florida y Cuba.
Por otro lado, la pasada semana también trascendió que la compañía JetBlue consideraba insostenibles los servicios a La Habana en el mercado actual y pondría fin a todas sus operaciones hacia la Isla a partir del 17 de septiembre de 2023.
JetBlue solicitó al DOT una prórroga de tres años de inactividad para 20 frecuencias semanales entre Estados Unidos y Cuba que utiliza para operar entre Fort Lauderdale, Florida y La Habana.
Asimismo, la aerolínea devolvió una frecuencia semanal al DOT que usa para prestar servicios entre Nueva York y la capital cubana.
Activistas cubanos en el exilio celebraron la decisión de la compañía y llamaron a otras como American Airlines y Southwest a no hacer negocios con el régimen castrista, que por décadas ha impedido a muchos cubanos regresar a su país.