MIAMI, Estados Unidos. – Cientos de potenciales migrantes de Cuba, Haití, Colombia, Ecuador, Guatemala, Honduras y El Salvador enfrentan trabas para abordar vuelos a Estados Unidos, pese a haber cumplido los requisitos de reunificación familiar, de acuerdo con un reporte publicado este jueves por Martí Noticias.
El nuevo gobierno de Donald Trump ha revertido varios de los programas migratorios establecidos bajo la Administración de Joe Biden, generando preocupación entre quienes ya tenían sus procesos aprobados.
Martí Noticias aludió al caso de la cubana Olga Lidia Hernández, a quien le fue negado el embarque al avión para viajar a Estados Unidos, a pesar de contar con los permisos de viaje requeridos por el Programa Cubano de Reunificación Familiar (CFRP, por sus siglas en inglés). “Cuando fuimos a abordar el avión nos dijeron que nos dirigiéramos a la Embajada de Estados Unidos y que allí nos darían más información, pero no nos dejaron viajar”, denunció la cubana. “Me dijeron que me habían denegado el permiso de vuelo y no me dieron más explicaciones”.
La madre de Olga, Bárbara León, se mostró consternada por la situación: “Llevo ocho años en espera de este momento. Viajé a Cuba y nos viraron del aeropuerto. Nos trataron muy mal. Nosotros hicimos bien nuestros procesos migratorios. No es justo”.
Historias similares se repiten en distintos países de la región y evidencian un patrón de cancelaciones de vuelos autorizados por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), según fuentes consultadas por Martí Noticias.
Bajo la administración de Biden, el CFRP y otros programas similares fueron modernizados para acelerar los trámites de reunificación. El Departamento de Seguridad Nacional señala que, una vez aprobada la petición I-130 y verificada la declaración de apoyo financiero (I-134A), el inmigrante recibía una autorización de viaje para presentarse en un puerto de entrada en Estados Unidos. Sin embargo, Trump derogó la mayoría de estas disposiciones y cerró el acceso a la aplicación CBP One.
En el caso de Cuba, el CFRP permaneció inactivo por años a raíz de los “misteriosos incidentes de salud” que afectaron a diplomáticos estadounidenses. Cuando el programa se reactivó, muchos vieron al fin la oportunidad de reunirse con sus familiares en territorio norteamericano.
Esta semana también trascendió que la Administración Trump había concedido a la agencia de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) poderes más amplios para deportar con rapidez a migrantes que ingresaron legalmente a Estados Unidos bajo programas de la era Biden.
Según un memorando interno obtenido por The New York Times, las autoridades de ICE podrán expulsar a migrantes que formaban parte de dos iniciativas clave de la Administración de Joe Biden: la aplicación CBP One ―que permitía programar citas de ingreso al país― y el programa de parole humanitario, que autorizaba la entrada temporal de migrantes de Cuba, Nicaragua, Venezuela y Haití.
Ambas medidas buscaban brindar vías legales para desalentar los cruces irregulares en la frontera. En total, alrededor de 1,4 millones de personas habían entrado a Estados Unidos mediante estos programas desde comienzos de 2023.
De acuerdo con el reporte, la intención de Trump es “usar cada faceta del aparato de control migratorio” para endurecer las políticas, no solo contra quienes cruzan la frontera sin autorización, sino también contra aquellos que ingresaron siguiendo procedimientos vigentes.