Será la pelea más trascendental para el invicto peleador cubano William Scull, quien buscará consolidarse al frente de su división con la victoria sobre el mexicano Saúl “Canelo” Álvarez.
El cubano William Scull enfrentará el mayor reto de su carrera el 3 de mayo en Riyadh, Arabia Saudita, cuando se mida contra Saúl “Canelo” Álvarez. Será la pelea más trascendental para el invicto peleador de Matanzas, quien buscará consolidarse como el mejor de la división y arrebatarle los títulos al mexicano.
Scull, actual monarca de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), ha trabajado con paciencia para llegar a este momento. Con un récord invicto de 23 victorias, nueve de ellas por nocaut, el cubano se coronó en octubre pasado al derrotar al ruso Vladimir Shishkin. Ahora tendrá la oportunidad de convertirse en campeón indiscutido de la división y cambiar el panorama del boxeo.
“He logrado grandes cosas”, comentó Scull en una reciente entrevista con El Nuevo Herald. “Para un muchacho como yo, que nació en un pueblito pequeño en Matanzas, convertirme en campeón mundial es algo que llevaré con orgullo por siempre”.
Ring Magazine, medio propiedad de Turki Alalshikh, anunció el sábado la pelea entre Saúl Álvarez y William Scull, consolidando la estrategia de la Riyadh Season de atraer grandes eventos del boxeo mundial. Scull, de 32 años, es un peleador metódico y técnico, aunque nunca ha enfrentado a un rival del calibre de Álvarez. Sin embargo, su disciplina y determinación podrían representar un desafío inesperado para el mexicano.
Turki Alalshikh, director de la Riyadh Season y de la Autoridad General de Entretenimiento, confirmó que el combate se celebrará el 3 de mayo en Riyadh y añadió que, si Álvarez gana, en septiembre podría volver a ser campeón absoluto.
Álvarez, de 34 años y considerado uno de los nombres más importantes del deporte, buscará recuperar el título de la FIB, que le fue retirado en julio de 2024 tras optar por enfrentar a Edgar Berlanga en lugar de cumplir con su defensa obligatoria ante Scull. Sin embargo, el cubano tiene otros planes: consolidarse como el nuevo rostro del peso supermediano.
Si Scull logra imponerse, no solo destronará a una de las máximas figuras del boxeo actual, sino que también pondrá en jaque los planes de un posible enfrentamiento entre Canelo y Terence Crawford en septiembre. Su victoria sería una de las mayores sorpresas de los últimos años y lo catapultaría a la élite del pugilismo.
La noche del 3 de mayo en Riad promete ser un punto de inflexión en la división. Álvarez intentará reafirmar su dominio, pero Scull tiene en sus manos la oportunidad de hacer historia y cambiar el destino del peso supermediano.