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Nos han dejado dos grandes del atletismo nacional: Osvaldo Lara, excorredor de cien metros planos, y el entrenador Sigfredo Banderas, un ícono de la escuela cubana de triple salto
Tocó al prólogo de este 2024 el pesar de ver partir, físicamente, a dos grandes del atletismo nacional. Osvaldo Lara, excorredor de cien metros planos, y el entrenador Sigfredo Banderas, un ícono de la escuela cubana de triple salto, nos han dejado su ejemplo de invencibles.
Lara fue finalista olímpico de los Juegos de Moscú, en 1980, en los cuales ocupó la quinta plaza en el hectómetro, y la octava en los 200 metros. Fue, además, ganador de los Juegos de la Amistad, en 1984. También alcanzó lauros en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, y en los Panamericanos.
Tras 68 años de vida, el pasado 1ro. de enero, falleció el velocista habanero, quien será recordado no solo por sus medallas, sino por la combatividad que expresaba en las pistas, desde el bloque de arrancada, donde siempre estará listo para devorar metros hasta la meta.
Banderas fue, por más de 40 años, uno de los más destacados preparadores del atletismo cubano. Fruto de su labor es la formación de varios medallistas mundiales y olímpicos de triple salto.
Fue quien condujo a Yoelbi Quesada a la conquista del metal bronceado, en la cita de los cinco aros de Atlanta-1996. También entrenó a Alexis Copello y a Yoel García, sobresaliente exponente de esa modalidad. Y fue quien llevó a Enrique Cepeda a coronarse campeón paralímpico, en Barcelona-1992 y en Sídney-2000.
Banderas falleció el pasado 2 de enero, tras una fructífera vida de formador, de maestro y de ganador.
Llegue a familiares y amigos de estas dos glorias del deporte cubano, las condolencias por tan sensibles pérdidas.
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