Las autoridades cubanas celebraron este martes la importación de 99 ambulancias para “el mejoramiento gradual de los servicios sanitarios en el país”. El lote, con 50 unidades nuevas y 49 de uso, tuvo un valor aproximado de 4 millones de dólares que fueron pagados por el Gobierno en su totalidad, aclararon los ministros de Salud Pública, José Ángel Portal Miranda, y de Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila.
En un reportaje realizado por el Canal Caribe, los funcionarios evitaron a toda costa declarar el origen de los vehículos, sin embargo, una parte de las ambulancias de marca Mercedes-Benz –presumiblemente las de uso– aún mostraban en sus costados rotulados el nombre de su anterior propietario, la Comunidad Valenciana (España).
La segunda parte del lote es de la marca china Foton, aunque no se sabe si fueron adquiridas directamente en la nación asiática
La segunda parte del lote es de la marca china Foton, aunque no se sabe si fueron adquiridas directamente en la nación asiática o a través de un tercer país. A cada provincia, incluyendo al municipio de Isla de la Juventud, se le asignarán entre tres y cuatro ambulancias.
Durante la entrevista, el titular de Transporte destacó la importancia de la llegada de estos vehículos, que se destinarán en su mayoría a los servicios hospitalarios de emergencia, “en un momento en que el servicio (de Salud) está realmente deprimido”. Rodríguez Dávila también señaló que los vehículos son la primera entrega de un programa que promete más lotes.
Por su parte, Abel González Palmero, director de servicios básicos de transporte del Ministerio de Salud Pública, reconoció que las ambulancias recibidas “no cubren las necesidades que tienen las provincias”, pero suavizó el comentario explicando que este es “un paso de avance” para el país.
La empresa encargada de gestionar la importación, así como de dar mantenimiento a los vehículos de segunda mano antes de su puesta en marcha, es MCV Comercial, una entidad mixta entre el Ministerio de Transporte y la alemana Mercedes-Benz.
El gerente de la compañía en Cuba, Ayman Makran, explicó al canal oficialista que MCV se encargará de revisar los vehículos antes de incorporarlos al parque nacional. “Si algún neumático está desgastado hay que cambiarlo, si alguna batería está vieja, hay que cambiarla. También hace falta incorporar más ambulancias al parque, ya que este está envejecido”, advirtió el empresario.
Constituida en 1995, MCV Comercial ha sido uno de los brazos del régimen para adquirir vehículos en el extranjero. Además de la marca Mercedes-Benz, que forma parte de la empresa mixta, la empresa también importa autos alemanes Fuso, los chinos Foton, Randon, Moura y Stemac de Brasil, Himoinsa y Lucas Diesel de España, así como ZF y Voith.
Además, MCV ha introducido en Cuba equipos de la marca alemana MTU, empleados en la generación eléctrica y en sistemas industriales, marítimos, equipamiento ferroviario y para la minería, la construcción y la agricultura.
La empresa también posee numerosos concesionarios de Mercedes-Benz en la Isla, siendo la única autorizada para vender esta marca, y una treintena de talleres para reparar los vehículos.
En su tienda virtual tiene disponibles insumos para la reparación de la carrocería, pinturas y herramientas
En su tienda virtual tiene disponibles insumos para la reparación de la carrocería, pinturas y herramientas. Sin embargo, los productos difícilmente podrían ser adquiridos por los cubanos, ya que se cobran en dólares estadounidenses y a precios estratosféricos.
No es la primera vez este año que el Gobierno adquiere ambulancias. El pasado septiembre la prensa oficial anunció una donación de cuatro de estos vehículos de uso, provenientes de Italia. Sin embargo, la cantidad de autos nunca parece ser suficiente para cubrir la demanda en las instituciones de Salud, según han admitido las propias autoridades del sector.
Este diciembre, fue noticia la importación de vehículos desde Miami a través de la empresa Maravana Cargo, fundada por el cubanoamericano Alejandro Martínez, y que cuenta con una licencia del Departamento del Tesoro de EE UU para el envío de paquetes, electrodomésticos y todo tipo de cargas, sin sufrir sanciones por el embargo.
El precio por importar autos a la Isla lo determina el propio régimen, y hasta el momento, oscila entre 20.000 y 56.000 dólares, en dependencia del modelo, año de fabricación y otras variables. Gran parte de este valor queda en manos del Gobierno, mientras Maravana retiene un promedio de 8.000 dólares por vehículo exportado, que cubren los gastos de transporte, el seguro y los trámites, además del beneficio de la propia compañía.
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