MADRID, España.- Este martes 23 de abril, Amnistía Internacional presentó su informe anual sobre la situación de los derechos humanos en el mundo, documentando preocupaciones en 155 países durante el año 2023. El informe vincula cuestiones a nivel global y regional, y analiza sus implicaciones para el futuro.
En su estudio sobre Cuba, la organización destacó la continua represión de la disidencia a través del hostigamiento, la persecución y el encarcelamiento de activistas, opositores políticos y periodistas. Además, se informó sobre trabas y ataques a defensores de derechos humanos, quienes en algunos casos permanecían en prisión sin un debido proceso. La Isla continuó el pasado año sufriendo una crisis humanitaria y económica, con escasez de alimentos, combustible y electricidad. La discriminación persistía, afectando a la población afrodescendiente, mujeres y niñas, personas LGBTI, disidentes políticos y miembros de comunidades religiosas, denuncia el documento.
Durante 2023, la vigilancia y el hostigamiento hacia activistas, opositores, periodistas y artistas continuaron siendo generalizados. La detención arbitraria y los procesos penales sin garantías fueron prácticas habituales, y las condiciones penitenciarias duras. Según la organización Justicia 11J, al menos 793 personas permanecían detenidas por su participación en protestas en toda la Isla el 11 de julio de 2021. En mayo, el Gobierno respondió con fuerza excesiva a una protesta por las condiciones de vida en Caimanera, Guantánamo, utilizando violencia física contra los manifestantes, recuerda Amnistía Internacional.
Asimismo, señala que en el periodo analizado el régimen cubano aprobó una ley sobre comunicación social, manteniendo la prohibición de medios de comunicación privados y estableciendo restricciones excesivas en relación con la información pública y el uso de Internet.
Por otro lado, destaca el caso de José Daniel Ferrer García, activista político y líder opositor detenido desde julio de 2021, quien permanece recluido en régimen de incomunicación mientras su salud se deteriora.
Los artistas y presos de conciencia Luis Manuel Otero Alcántara y Maykel “Osorbo” Castillo Pérez, condenados en 2022 a largas penas de prisión en procesos judiciales sin garantías, vieron amenazada su integridad física y mental debido a las duras condiciones de reclusión y la violencia ejercida por otros reclusos.
A lo largo del año fue habitual que la policía citara a periodistas y activistas para interrogatorios relacionados con sus actividades lícitas. La situación se vio agravada por la falta de una institución nacional de derechos humanos conforme a los Principios de París, así como por la prohibición a que los medios internacionales hicieran seguimiento a los juicios de disidentes políticos.
En resumen, el informe de Amnistía Internacional pone de manifiesto, una vez más, la grave situación de derechos humanos en Cuba, que durante 2023 se constató en la represión continua, la crisis económica y humanitaria, y la persistencia de la discriminación en diversas esferas de la sociedad cubana.
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