SAN LUIS POTOSÍ, México.- En un contexto en el que el consumo de drogas en Cuba ha aumentado, la prensa oficialista ha informado de un caso sobre una presunta vendedora de marihuana condenada por ese hecho.
Según trascendió en una nota del diario oficialista local Girón, una persona de entre 40 y 45 años, a quien el medio nombró “Rachel”, fue condenada a seis años de privación de libertad, en la causa 1-165 del 2003 de la sala primera de lo penal del Tribunal Provincial Popular de Matanzas.
La versión oficialista alega que la cubana fue acusada en 2023 por el presunto crimen de adquisición y tenencia de drogas ilícitas o sustancias de efectos similares.
En referencia a los hechos ocurridos, Girón expuso que Rachel fue detenida en 2023 en el peaje de Varadero y al revisar sus pertenencias encontraron un paquete con 0,75 gramos de cannabinoide sintético.
Aunque argumentó que la cantidad de producto era para consumo personal, las “investigaciones” demostraron que, días antes de su detención, había visitado a un hombre de San Miguel del Padrón a quien le proporcionó el material a 5.000 pesos.
Este último, como intermediario, recibió un pago de 200 pesos. La llamada Rachel solía vender los cigarrillos de marihuana sintética en Cárdenas a un precio que oscilaba entre los 150 a 180 pesos.
Los policías encontraron en su celular audios y mensajes donde promovía la venta de su producto. También aseguran que mezclaba la marihuana sitética con picadura de cigarro “para aumentar la cantidad”.
En el país, no obstante, otra droga se ha movido con gran rapidez entre la población. El “químico”, una droga económica, genera una gran demanda a un precio insuperable: entre 150 y 200 pesos la dosis, mientras una libra de azúcar supera los 300 pesos.
Como el efecto dura poco, los clientes compran y compran. La poca transparencia en el país sobre adicción y consumo de esta nueva droga, una sustancia menos cara que una caja de cigarros suaves, deja los números en el terreno de la especulación.
La mayoría de los consumidores de droga en Cuba son jóvenes y adolescentes, según explicaron funcionarios de instituciones de salud cubanas.
En el municipio Centro Habana, el 75% de las personas que consumen droga tienen entre 20 y 30 años, según trascendió en el espacio oficialista de la Mesa Redonda.
Además, el 95% de todas las personas enfermas por drogadicción en este territorio tiene entre 16 y 40 años.
En un lamentable caso, el pasado año tres niños de la provincia de Villa Clara sufrieron una intoxicación leve tras consumir unos caramelos de marihuana que habían aparecido a finales en el Aeropuerto Internacional Abel Santamaría de esa provincia.
Un comunicado emitido por la dirección provincial de Salud Pública y el departamento del Programa de Atención Materno—Infantil (PAMI) de Villa Clara —y publicado en la cuenta de Facebook del Hospital Provincial Pediatrico Universitario “Jose Luis Miranda García” — indica que los tres menores mencionados y otros dos “consumieron dos paquetes de caramelos que en su envoltura referían marihuana”.
Los pacientes llegaron al Cuerpo de Guardia y fueron hospitalizados y puestos en observación en virtud de los protocolos establecidos para esos casos.
Sin embargo, al día siguiente los menores “se fugaron de la institución hospitalaria” y “no retornaron al centro debido a su evolución sin contratiempos, al tiempo que ya cumplían los requisitos para el egreso”
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